Nahir Galarza, la joven que fue condenada a prisión perpetua por el crimen de su ex novio Fernando Pastorizzo en 2017, confesó que está embarazada de cinco meses y que no sabe con certeza quién es el padre del bebé en camino.
Si bien mantuvo la noticia oculta durante 20 semanas, todo salió a luz cuando debió ser atendida por presentar pérdidas. Encerrada en la Unidad Penal Nº 6 Concepción Arenal, la cárcel de mujeres de Paraná, Nahir presentó sangrados y un fuerte dolor abdominal que le despertaron preocupación. No era la primera que le pasaba, pero éste vez decidió recurrir al médico.
“Lo oculté por miedo, porque quiero cuidar a mi bebé”, admitió que la joven, quien se enteró cuando estaba de dos meses debido a que durante ese tiempo no tuvo su período. “Mi idea era seguir esperando y aguantar lo que más pudiera, más que nada por este miedo, pero ahora no me quedó otra. Supongo que va a ser un escándalo cuando se entere todo el mundo, con sus críticas y sus opiniones; también quería evitar eso”, remarcó.
La única que siempre supo de su estado fue su amiga y compañera de celda, Yanina Soledad Lescano. “Que ella sepa me genera confianza. Me ayuda porque yo no tengo ni idea y ella es mamá, y como mamá me contiene y me da consejos, me hace sentir bien. Se lo dije porque me generaba tranquilidad que ella, que está acá conmigo, lo supiera”, remarcó durante una entrevista que el concedió al sitio Ahora.
Consultada acerca de quién es el padre de la criatura, Nahir se mostró dubitativa y no supo contestar con precisión. “No sé quién es el padre, no lo puedo confirmar porque no estoy segura”, resaltó.
Con esa respuesta, la joven dio a entender que además de Matías Caudana, que fue la única relación amorosa que se le conocía, tuvo contacto sexual con otras personas. “Con Matías tuve una relación de amistad, pero fue a principio de año y después ya no me ví más y no supe más nada. Tengo otros amigos, compañeros, gente nueva que he conocido”, explicó. Y continuó: “He conocido gente en la facultad, o gente que me ha llamado, con la que pegué onda, o conocidos de mis compañeras…”
Hasta el momento, Nahir no se hizo ningún chequeo médico que acreditara su confesión. Su abogado se está encargado de ello. De confirmarse el embarazo, el bebé nacería en enero.
“Deseo que pueda vivir fuera de este lugar, que sea feliz, que nunca tenga que pasar por nada de lo que yo viví”, pidió Nahir, quien por el momento prefiere quedarse en el Pabellón de Máxima Seguridad donde está alojada.
“Acá estoy bien contenida. Tengo miedo de que me lleven a otro lado, por eso también no lo contaba”, concluyó.
Infobae