La soleada mañana rosarina iluminó a Newell’s en el inicio de la jornada dominguera correspondiente a la séptima fecha de la Superliga. El golazo que festejó Jerónimo Cacciabue fue una muestra del gran presente a atraviesa la Lepra en su lucha por la permanencia.
El joven de Montes de Oca recibió una descarga de Maxi Rodríguez e improvisó una obra de arte con un remate de media distancia que se clavó en el ángulo superior derecho de Pocrnjic. Todavía no habían transcurrido 3 minutos y el equipo de Frank Kudelka ya superaba a un Aldosivi deslucido y sin ideas.
La prematura ventaja le permitió al dueño de casa manejar los tiempos del partido y lastimar a un Tiburón herbívoro. El dominio territorial y de posesión era del local, pero la falta de efectividad en el último toque mantenía el desenlace en suspenso. Incluso en el complemento Newell’s optó por una propuesta más conservadora al regalarle mayor protagonismo al elenco marplatense para apostar por los contragolpes.
Todo se resolvió a 9 minutos del final cuando Julián Fernández capitalizó un despeje del arquero y selló el 2 a 0 para que el Parque sea una fiesta. Con la notable producción la Lepra demostró que tiene argumentos para mantener la esperanza de la permanencia. De mantener el nivel demostrado ante Aldosivi, será muy probable ver al combinado rosarino en Primera la próxima temporada. Y tal vez en alguna competición internacional.
