En su primera aparición pública desde el regreso al país de Juan Guaidó, este martes Nicolás Maduro encabezó un acto para conmemorar el sexto aniversario de la muerte de Hugo Chávez. Desde el cuartel de la montaña, el dictador venezolano criticó a los «traidores» que abandonaron al régimen y convocó para el próximo sábado una marcha «antiimperialista».
«El 9 de marzo lo decreté como el Día del Antiimperialismo y por eso convoco a todo el pueblo a la calle para defender la patria de la agresión de EEUU», manifestó Maduro, en referencia al decreto de Barack Obama en el que calificaba a Venezuela como una «amenaza» para Estados Unidos.
El dictador también llamó a las mujeres a movilizarse el viernes por el Día Internacional de la Mujer, y adelantó que dará «importantes anuncios».
La convocatoria que realizó Maduro coincide con la del presidente interino Guaidó, quien el lunes, en su retorno al país, llamó a la oposición a marchar el sábado.
Mucha incertidumbre hubo respecto al regreso de Guaidó luego de las amenazas del régimen chavista con tomar medidas en su contra. El propio Maduro había advertido que el opositor enfrentaría a la justicia del régimen. Pero en su discurso de este martes, el dictador no se refirió al presidente interino, sólo envió un mensaje indirecto a la oposición.
«A ellos -la oposición venezolana- ni le paremos bolas. Que siga la minoría alocada en su amargura, los vamos a derrotar. Por Chávez, lo haremos. Por Venezuela, lo haremos», expresó.
El mandatario bolivariano también apuntó contra los funcionarios chavistas que abandonaron al régimen, a quienes tildó de «traidores»: «A los traidores les corresponde la soledad y la derrota. Minoría de oportunistas y cobardes que ante las primeras dificultades movieron negocios para traicionar a la revolución».
«Hubo quienes pensar que esto se acababa, hubo quienes pensaron de mala fe, y traicionaron a la revolución, y hoy están secos en su traición y en su soledad, sin patria y sin destino. Los que traicionaron a Chávez están condenados a la derrota eterna», agregó.
Durante el acto de homenaje, Maduro condecoró a los militares que reprimieron violentamente a los voluntarios civiles que intentaron ingresar el pasado 23 de febrero la ayuda humanitaria al país.
«Estamos en batalla, estamos enfrentando la agresión imperialista más poderosa que jamás haya embestido contra Venezuela en más de 200 años de república», sostuvo.
La brutal represión, que es considerada por el régimen como una «victoria», dejó un saldo de seis muertos y decenas de heridos.