Nicolás Maduro apareció en público por primera vez después de una jornada de alta tensión en todo Venezuela y aseguró que lo que sucedió fue un «intento de golpe de estado», pero que se «impuso la lealtad a la traición».
En un acto por el Día del Trabajador, tras recordar los problemas que tuvo Hugo Chávez en 2002 y salió adelante, dijo: «Tampoco han podido, ni podrán con nosotros en ninguna circunstancia que nos toque vivir. No pueden entender la conciencia de los humildes. La voluntad absoluta de defender esta revolución y la Constitución bolivariana».
«Tengo las pruebas en las manos del complot de la derecha golpista. Están huyendo a través de las embajadas, pero la justicia, tarde o temprano los llevará a la cárcel», dijo Maduro ante la multitud y aseguró que la oposición y «el imperialismo» quieren llevarlos a una «guerra civil».
En otro tramo de un extenso discurso, Maduro negó haber estado negociando su salida del poder. «Le hicieron creer al imperialismo norteamericano que yo me iba a rendir y que me iba a ir del país. Que estaba arriba de un avión que me iba a Cuba y que los rusos me bajaron».
«Dejenmé decirle que fueron engañados y que ustedes han engañado al presidente de los Estados Unidos Donald Trump. Se creyeron sus propias noticias falsas», dijo el chavista frente a la multitud a la que llamó a salir a las calles a defender al régimen.
El Tribuno