En otro tramo de su exposición, el director de la Anses admitió que la inflación es este año superior a lo que esperaba el Gobierno y que esto implicó que “la movilidad vaya con 6 meses de atraso”, pero aseguró que este “desfasaje se va a corregir el año que viene”.
Y defendió el cambio de la fórmula de movilidad aprobado a fines de 2017. Dijo que “es buena y es mucho más directa, como la que tiene la mayoría de los países” .
Los datos oficiales marcan que, con el aumento de diciembre, este año punta a punta las jubilaciones y demás prestaciones de la Seguridad Social se incrementarán un 28,5%, que contrasta con el 47/48% de inflación prevista para este año. Si esta comparación se extiende a septiembre de 2017, con el cambio de fórmula, la pérdida se eleva a 26 puntos porque, además, el ajuste semestral pasó a ser trimestral, pero salteando el aumento de un trimestre, el de diciembre de 2017.
En el caso de la jubilación mínima, esa pérdida se fue produciendo en distintas magnitudes mes a mes a lo largo del año y a diciembre la pérdida acumulada para la jubilación mínima sumará $13.243,50. Además como los ajustes de las jubilaciones y prestaciones sociales fueron inferiores a la inflación, lo perdido desde fines de 2015 alcanzaría a $29.771,60 a pesos de diciembre de 2018, también para el caso de la jubilación mínima. Eso equivale a 3 jubilaciones mínimas mensuales.
Reclamo del Defensor de la Tercera Edad
En base a estos números, el Defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, reclamó al Gobierno un urgente reajuste de emergencia para jubilados, pensionados y discapacitados, de $5.160, integrado a sus haberes, en tres cuotas sucesivas de $1.720, a abonarse con los mensuales de diciembre, enero y febrero, de tal forma que se constituyan como base de cálculo de la movilidad de marzo”.
Ismael Bermúdez/Clarín