Otra vez un micro de dos pisos. Otra vez un chofer que pierde el control del vehículo y causa un accidente. Pero a diferencia de lo ocurrido en la tragedia de Lezama, donde fallecieron dos niños de 11 años que se iban a viaje de egresados a San Clemente, en Mendoza no hubo que reportar víctimas fatales.
El accidente ocurrió este lunes alrededor de las 10 de la mañana sobre el Acceso Este, a la altura del Mendoza Plaza Shopping, cuando el chofer del interno 8708 de la empresa Chevallier perdió el control de micro, se cruzó de carril, circuló en contramano unos 30 metros, chocó a dos autos y terminó incrustado en un poste de luz.
Como consecuencia del impacto, los dos choferes resultaron con heridas de consideración y fueron trasladados al Hospital Central de Mendoza donde permanecen en observación. De las 24 personas que iban a bordo, unas 20 también debieron recibir asistencia médica por distintas dolencias.
“El micro había salido a los 9 horas de la terminal de Mendoza con destino final a Altas Cumbres, en Córdoba”, precisó a Radio Nihuil Rosario Fernández, encargada de la boletería de Chevallier, quien además remarcó que “era un coche OKM” y que “los conductores tenían las horas necesarias de descanso porque habían llegado ayer de Córdoba”.
Si bien hasta el momento no se sabe qué pudo haber ocasionado el accionar del chofer, los testigos coinciden en que el micro no transitaba a alta velocidad y que todo se habría desencadenado cuando se le cruzó un auto.
“La versión que trascendió es que el chofer maniobró para no chocar a un auto que se le cruzó. Yo le pedí a Dios que no volcáramos”, relató a TN una mujer que resultó ilesa. “Yo estaba sentada en la parte de abajo, en el segundo asiente. Pude salir con rapidez al ver que el micro había perdido mucho combustible por temor a una explosión”, señaló.
Por su parte, Jorge Carrizo, de Defensa Civil de Mendoza, informó que “el golpe más violento fue el que se produjo de manera frontal contra las columnas de los alumbrados que contiene la parte central del Acceso Este”. Y al hacer una descripción de cómo quedó el vehículo dijo: “El habitáculo de la cabina del chofer quedó prácticamente deformado, fue un golpe tremendo”.
Consultado sobre lo que pudo haber provocado el accidente, Carrizo precisó que “todavía no se pudo conocer la versión de los choferes porque cuando fueron auxiliados por los Bomberos estaban en estado de shock”.
Otra mujer, que fue asistida en el lugar por personal médico y a la que le tuvieron que dar dos puntos en su frente, se mostró agradecida de que el choque no haya terminado en tragedia: “Lo bueno es que estamos vivos. Ya le avise a mi hijo para que se quedara tranquilo”.
Mientras la policía y los bomberos intentaban despejar el Acceso Este para volver a habilitar el tránsito, sobre la banquina se montó una especie de campamento sanitarios para hacer las curaciones a los pasajeros que resultaron con heridas leves.