La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, confirmó que el Gobierno tiene la intención decrear este año un registro de ADN compuesto por todas aquellas personas que cometan delitos dolosos.
«Ya reglamentamos el (registro de) ADN de violadores, ahora queremos uno para todos los delitos (dolosos)», dijo Bullrich en el programa La Noche de Mirtha Legrand, que se emite por El Trece.
Junto a dicha iniciativa, Bullrich anticipó que el oficialismo también pondrá especial foco en otros tres proyectos de ley en 2019, al menos en lo que refiere a materia de seguridad: la reforma al Código Penal; la Ley Penal Juvenil – que entre otras cosas bajaría la edad de imputabilidad a 15 años – y la ley denominada «anti-barras».
Con respecto a la reforma del Código Penal en particular, la ministra indicó que buscarán la inclusión de «cosas que piden los ciudadanos», tales como la acumulación de penas – «para que los que reciben perpetua no salgan más» – y penas para los actos preparatorios, que Bullrich definió como «las conductas que demuestran la intención de llevar a cabo una acción violenta».
En la actualidad, el Código Penal excluye a los actos preparatorios y comienza a penar en grado de tentativa las acciones ejecutivas del delito. Es decir, a partir del momento cuando una persona comenzó a realizar actos tendientes a la comisión del crimen.
«Desde el Gobierno hicimos un cambio y ahora tenemos un sistema penal que da asistencia a la víctima y que no le da ninguna ventaja a los delincuentes», aseguró Bullrich.
La ministra puso particular foco en la lucha contra el narcotraficante, que «Argentina tenía un sistema de seguridad muy malo y casi inexistente» en esta materia porque «con el kirchnerismo estábamos en el mundo del revés, ya que cuando el policía hacia las cosas bien lo criticaban y cuando el delincuente delinquía había organizaciones que lo respaldaban».
En esa línea, indicó que las fuerzas de seguridad han incautado «1.250 millones de dosis de droga en lo que va de la gestión (actual)». «Siento que lo que estamos haciendo es desestructurar un poder que, si lo dejabamos crecer como hacían los kirchneristas, nos comía», agregó Bullrich.
En otro pasaje del programa, la ministra se refirió al nuevo protocolo de uso de armas de fuego para las fuerzas de seguridad e indicó que, a pesar de la polémica que generó en su momento, cinco jueces distintos han confirmado su constitucionalidad.
«Tuvo cinco pedidos y cinco jueces dijeron que era constitucional. Un juez de Junín dijo que los que habían presentado el recurso ni habían leído el protocolo. Lo que escribimos es lógico y normal, y está basado en los reglamentos de las policías del mundo que tienen mejores resultados que nosotros».
Bullrich se refirió a su vez a la compra de armas Taser, hecho que también generó controversia luego de trascender: «Las estamos por comprar. En marzo llamamos a licitación. Lo que hace la Taser es proveer un medio no letal cuando hay una conducta violenta. Me están discutiendo usar un arma no letal en vez de un arma letal, algo que mata», remarcó.
Consultada por su relación con la diputada nacional y referente de Cambiemos, Elisa Carrió, la ministra dijo: «Hace un tiempo que no hablo. Si quisiera hablar conmigo, tiene todas las posibilidades de hacerlo. Quizás podríamos hablar las cosas antes».
La líder de la Coalición Cívica criticó a la ministra y sus políticas en reiteradas ocasiones a lo largo de los últimos meses. En diciembre, refiriéndose al protocolo de uso de armas de fuego, Carrió dijo en un tuit que «nosotros no vamos a ir al fascismo».
«Esto no significa que la Policía no tenga el poder para mantener el orden, pero a la ministra se le va la mano», argumentó Carrió entonces.
Finalmente, cuando a Bullrich le preguntaron si imitaba algunas de las ideas del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró que, en realidad, la administración brasileña es la que sigue su línea.
«Hice una comparación entre la ley que presento (el ex juez y actual ministro de seguridad y justicia Sergio) Moro hace un mes, y todas las iniciativas que presentamos están (incluidas). En lo que respecta al modelo de seguridad, Argentina tuvo al kirchnerismo y Brasil, sacando excepciones en Río de Janeiro, tuvo algo bastante similar. Entonces las respuestas que tenemos que dar son similares», dijo la ministra.
Y remató: «Prácticamente todos los temas que hemos ido analizando apuntan a la corrección del modelo de Zaffaroni. Moro lo está analizando como corrección al modelo de Lula».
