El jefe de Gabinete Marcos Peña ratificó este sábado el rumbo económico y el defendió los «compromisos asumidos» del Gobierno con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para achicar el gasto público. «El FMI marca que estamos cumpliendo las metas y se han sorprendido con la rapidez con la que lo hemos logrado», afirmó.
El viernes, el organismo multilateral comunicó su aprobación de la tercera revisión del acuerdo stand by firmado con la Argentina en 2018, donde planteó puntos a favor y puntos críticos sobre la situación de la política económica. La decisión incluyó el aval de un giro de USD 10.800 millones para el país.
Según Peña, el informe fue «muy positivo». «Tenemos un acuerdo con el FMI y un compromiso que hemos asumido de ordenar nuestras cuentas. Tenemos que pasar este año y la cuestión electoral genera mayor incertidumbre», admitió.
En una entrevista con radio Mitre, el funcionario se refirió a otros temas, entre ellos la inflación, que anticipó que «va a seguir alta» en marzo. Y cuestionó la posibilidad de implementar un sistema de control de precios, en relación al reclamo de varios sectores para que se tomen medidas más drásticas ante los aumentos en los alimentos.
«El control de precios es una herramienta que ha fracasado en nuestra historia y en ningún lugar de mundo se usa», afirmó Peña, y consideró que tiene que haber «un control para que no haya abusos ni posiciones dominantes». El comentario está en sintonía con el proyecto de ley que presentó esta semana la diputada de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, que busca evitar los abusos comerciales en las góndolas de los supermercados.
«El rol del Estado tiene que ser activo ayudando a coordinar expectativas, en los distintos productos, centralmente en tema alimentos. El Estado tiene que estar presente en esta discusión», señaló Peña.
Con respecto a la volatilidad en el valor del peso, el jefe de Gabinete aseguró que «no implican un motivo para alarmarse» y destacó que a pesar de la suba, la divisa estadounidense aún está por debajo de la inflación. «Si uno mira el dólar en los últimos seis meses, con sus movimientos para arriba o para abajo, está por debajo de lo que subió la inflación. Así que hay que tener la tranquilidad de que los movimientos del dólar no necesariamente implican un motivo para alarmarse», sostuvo.
En ese marco, el funcionario sostuvo que «el tipo de cambio fijo ha sido un gran paliativo errado, que nos generaba tranquilidad en el corto plazo, pero un enorme problema a largo plazo», por lo que defendió el tipo de cambio flotante. «El tipo de cambio flotante ante un problema externo ajusta esa variable y preserva el empleo, muchas veces con un impacto de corto plazo en la inflación, que es algo que hay que trabajar y modificar estructuralmente», agregó.
Además, hizo una comparación de la crisis actual con otras que atravesó el país. «Uno recuerda una crisis como la del año pasado y la del Tequila en el ’95, que generó una caída del PBI parecida pero duplicó el desempleo, lo llevó al 18%», manifestó.
Inflación alta en marzo
El jefe de Gabinete admitió que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo «va a seguir alto» y anticipó que el presidente Mauricio Macri evalúa anunciar medidas en las próximas semanas, en el marco de unas reuniones de trabajo junto a la Unión Cívica Radical (UCR).
Peña adelantó que esas decisiones tienen el objetivo de «bajar la inflación y reactivar la economía, que es el tema que más angustia y preocupa a los argentinos». En concreto, se trata de políticas para «potenciar el consumo y dar mejores situaciones a las pymes».
A pesar de las dificultades en la economía, el funcionario remarcó que en lo «más estructural venimos avanzando». «La crisis nos retrasó objetivos y nos puso frente a este momento duro que estamos viviendo, al mismo tiempo hay avances muy concretos que se han logrado y no ha sido el esfuerzo en vano», afirmó.
«Hacia el futuro hay que tener en claro que estamos haciendo lo que han hecho todos los países de la región hace 15 o 20 años, que es poner la casa en orden y tener estabilidad hacia el futuro. No creo que sea bueno confundir los síntomas de la angustia en el corto plazo con la idea de volver a los atajos, las soluciones mágicas que destruyeron la economía», completó el funcionario.
Interna en Cambiemos
En medio de los reclamos de la UCR para que haya primarias obligatorias con distintos candidatos en Cambiemos, Marcos Peña ratificó que irán por su reelección el presidente Mauricio Macri y la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, y aclaró que no hay plan B de cara a las elecciones de octubre.
«La gran mayoría del radicalismo sigue creyendo y confiando en Cambiemos como proyecto más allá de la coyuntura», sostuvo el jefe de Gabinete, quien ratificó que «somos un solo equipo» junto a la UCR y a la Coalición Cívica.
Sobre quién compartirá la fórmula en la boleta presidencial, Peña aseguró: «La decisión de la candidatura a vicepresidente le corresponde al Presidente, que la tomará más cerca del momento adecuado, que es el cierre de listas (el 22 de junio próximo). Hoy el foco está puesto en otro lugar. Cualquier hombre o mujer de Cambiemos está en posibilidad de ser candidato a vicepresidente».
