Con el argentino Ricardo Gareca como entrenador, Perú (que le anularon dos goles) no pudo con Venezuela y empató 0 a 0, en el debut de ambos equipos en el Grupo A de la Copa América de Brasil. La estrella del partido fue el arquero venezolano Wuilker Faríñez: con su actuación evitó la derrota de la Vinotinto, que jugó más de un cuarto de hora en inferioridad tras sufrir la expulsión de Luis Mago.
El encuentro se disputó en el estadio Arena do Gremio, en la ciudad de Porto Alegre, con capacidad para 55.000 espectadores, y contó con el arbitraje del colombiano William Roldán.
Perú empezó muy bien. Dinámico y preciso, el equipo de Gareca se hizo dueño del partido. De hecho, antes de los diez minutos abrió fuego y Christofer Gonzales marcó un gol, pero fue anulado por posición adelantada, que fue confirmada por el VAR. Poco después, Christian Cueva tuvo una oportunidad desde la izquierda, pero falló.
Venezuela, mientras tanto, trataba de recuperar la pelota: cada vez que lo hacía, salía directo, a puro vértigo, para desatar alguna contra. Lo de Perú era más elaborado y paciente. Lo que estaba claro era que, cada uno con su estilo, buscaba el arco rival.
En el arranque de la segunda parte, Venezuela profundizó su levantada y, poco a poco, empezó a preocupar al conjunto de Gareca. Los de Dudamel dieron un paso más adelante y ocuparon bien los espacios en ataque. A los 15 minutos ya estaba claro: los caribeños se acercaban al primer tanto.
Sin embargo, Perú volvió a tomar el protagonismo y Jefferson Farfán marcó un gol, pero otra vez fue bien anulado por el VAR. Perú volvió a respirar más tranquilo cuando Luis Mago, lateral de Venezuela, se fue expulsado. Poco después hubo una jugada muy clara para los de Gareca, con varios rebotes, que no pudieron convertir: Faríñez, de un nivel extraordinario, fue clave para evitar el tanto.
Los últimos minutos fueron para Perú, pero el resultado de mantuvo igual: un empate que deja a Brasil como único líder del grupo.