Personal policial fraguó un ingenioso plan para llegar a la casa de un escurridizo muchacho de 21 años en el barrio Bruno Volta y así ponerlo tras las rejas, ya que estaba acusado de agredir en reiteradas oportunidades a su pareja y eludía hábilmente su presentación ante la Justicia de Género.
Este miércoles, los numerarios desplegaron un plan para detener al sospechoso en su propia casa. Los policías sabían que el acusado eludía a la Justicia con gran habilidad, a tal punto que la Jueza de Control de Género Dra. Cecilia Laportilla, había solicitado su captura provincial y nacional.
Es así que los guardianes del orden para no posibilitar su escapatoria, se vistieron con mamelucos celestes, similares a los que personal de salud utiliza en sus campañas de vacunación.
La presencia de personal sanitario en los barrios de Capital es una postal habitual ante la situación de pandemia por la que atraviesa la provincia y esa habría sido la fachada perfecta para dar con el sospechoso.
Los investigadores llegaron a una casa en el barrio Bruno Volta, donde fueron recibidos por una persona del sexo masculino, cuya fisonomía era similar a la del prófugo y tras corroborar sus datos personales, de inmediato se identificaron como policías y lo demoraron en el umbral de la puerta de calle del inmueble.
Posteriormente, el joven, sobre quien pesan varias denuncias por agresión en perjuicio de su pareja, fue trasladado y alojado en calidad de detenido a una celda de la Comisaría de la Mujer y la Familia N°1, con conocimiento a la Dra. Judith Díaz, fiscal de feria, quien ordenó que se realizaran todos los trámites pertinentes para que en lo inmediato responda de las acusaciones en su contra.
