El caso de un joven detenido en la subcomisaria Iriarte de Las Heras (Mendoza) llamó la atención de los efectivos que desempeñan tareas en ese lugar.
Esto debido a que mientras estuvo alojado en el calabozo, el detenido muy bien parecido recibió la visita de sus tres “novias”.
Se trata de Martín Fabre (29), un sujeto oriundo de Río Negro que, tras cometer un delito, había ido de esa provincia para empezar una nueva vida en Mendoza bajo la falsa identidad de Nicolás. D.
Todo empezó el 7 de julio pasado, cuando efectivos de la División Delitos Contra la Integridad Sexual irrumpieron en una casa ubicada en Las Heras donde Fabre vivía. La medida se había originado a raíz de una denuncia por abuso sexual simple en su contra.
Luego de trasladarlo a la subcomisaria, los oficiales lo entrevistaron para chequear otros datos personales pero el joven empezó a ponerse nervioso y esto generó dudas en los uniformados.
Ante esto, los efectivos procedieron a la identificación utilizando el Sistema Biométrico la cual arrojó una identidad errónea. Rápidamente se procedió a ser identificado dactiloscópicamente tras lo cual descubrieron la identidad real del sujeto.
Su nombre real era Martín Fabre y poseía un pedido de captura solicitado por la primera Cámara del Crimen, de la ciudad de San Carlos de Bariloche, Rio Negro.
Fabre había sido condenado a 6 años de prisión por un delito cometido en 2015. Según las fuentes, el hombre había golpeado al hijo de su pareja de aquel entonces provocándole lesiones graves que había terminado con la internación del niño.
Tiempo después, el hombre abandonó Río Negro y se estableció en Mendoza donde permaneció prófugo hasta principios de este mes. Este jueves una comisión de efectivos de la Policía de Rio Negro se hizo presente en Mendoza para trasladarlo a Río Negro.
Fabre y sus tres «esposas»
Uno de los elementos que deben haber ayudado a Fabre a conseguir trabajo y afrontar una vida nueva en Mendoza sin duda fue su aspecto físico. En su paso por la provincia, el joven se relacionó con muchas mujeres y, al parecer, con varias al mismo tiempo.
Según trascendió, durante los casi 11 día que estuvo alojado en la subcomisaria recibió la vistita de tres mujeres distintas.
Primero, apareció una joven con un pequeño que sería producto de la relacióncon Fabre. Después, lo visitó una joven embarazada cuyo bebé sería también producto de su relación con el detenido y por ultimo una joven sola con quien también mantenía una relación.
Cabe destacar que la denuncia por abuso sexual la habría radicado una mujer mayor con quien también habría tenido una relación.
Incluso, antes de ser trasladado a Río Negro, las tres mujeres coincidieron en la subcomisaria y se anoticiaron de los secretos del joven carilindo.
Violencia extrema
El hecho ocurrió en abril de 2015 en el departamento que compartía con su pareja. Allí, el sujeto sometió al niño a permanentes maltratos verbales y físicos. Lo golpeaba en la cara, espalda, zona pubiana, miembros superiores e inferiores e incluso lo empujaba.
El abril empujó al niño mandándolo a un rincón porque comía despacio y él pretendía que lo hiciera rápido. El pequeño se golpeó contra un mueble y como consecuencia de ello sufrió un severo golpe en el párpado inferior del ojo derecho.
Al día siguiente le apretó fuertemente la nariz al niño lo que provocó que se le hinchara el otro ojo. El miércoles 22 lo sacó de la cama, lo sacudió y le pegó un puntapié en la pierna porque se había hecho pis en la cama.
La condena
En octubre del 2016 Fabre fue condenado a seis años de prisión. Según informó el diario El Cordillerano, mientras el fallo era apelado el joven se radicó en Mendoza.
Esto gracias a que, tras ser condenado, no se le impuso la prisión preventiva pero sí la obligación de presentarse periódicamente en una dependencia policial cercana a su domicilio.
El fallo original fue confirmado por el Superior Tribunal de Justicia de Río Negro un año después de ser dictado y el caso llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación a pedido de la defensa, pero el máximo tribunal de justicia de la Nación rechazó los planteos defensivos.
Así, la condena a Fabre quedó firme y el tribunal dispuso que se efectivice la detención del sujeto y el traslado a una unidad carcelaria para efectivizar la pena.
Sin embargo, cuando fueron a buscarlo al domicilio fijado en Mendoza no lo encontraron y desde entonces se decretó su rebeldía y el pedido de captura.
Los Andes