El presidente de Olímpico, analizó la participación en la edición 2017/18 de la Liga Nacional de Básquetbol y esbozó los alcances del proyecto que se viene para la organización, con objetivos claros: profesionalizar áreas de trabajo y continuar apostando a la infraestructura. Además dijo que la realidad económica condiciona cualquier iniciativa, pero que dentro de las posibilidades se quiere armar un equipo que represente el sentir del hincha.
– ¿Cómo evalúa la temporada?
– Sin dudas fue una temporada difícil, no pudimos alcanzar los objetivos deportivos ya que aspirábamos a estar entre los ocho mejores equipos de la competencia.
– Sobre todo con muchos contratiempos desde un inicio.
– Así es, apostamos por Laginestra que venía de ser reconocido como el mejor entrenador de la temporada pasada, pero está comprobado que la suma de nombres no hacen un equipo. Está a las claras que hubo errores en el armado y se hicieron cambios innecesarios para enderezar el rumbo. Sumado a esto, algunas lesiones que diezmaron la estructura. A partir de entonces decidimos probar suerte con Adrián Capelli que de entrada tuvo problemas para el rearmado con la sorpresiva decisión de Guillermo Díaz de dejar el equipo. Posteriormente, cuestiones internas obligaron a prescindir de los servicios de Green sabiendo lo que significaba en ese tramo de la competencia. Así llegamos al final de una temporada que desde lo deportivo no nos dejó conformes.
– ¿Cómo se encara la próxima temporada?
– Hace tres ligas que venimos con la vara alta en el armado del equipo y como dije antes, esto no garantiza ningún campeonato, ni mucho menos. Hacen falta más cosas para alcanzar este objetivo que no solamente se consigue dentro de la cancha. Es por ello que, en primer lugar, trazamos un eje fundamental para consolidarnos como organización. Aspiramos a profesionalizar áreas de trabajo como relaciones púbicas, marketing y comunicación. Uno de los grandes desafíos es seguir creciendo con la marca “Olímpico” mediante la difusión de valores, a través de acciones sociales comprometidas con la comunidad, y la práctica de disciplinas deportivas. Por dar un ejemplo, hoy Olímpico es uno de los pocos clubes de la provincia que prioriza actividades como la Natación Adaptada. Vamos en este sentido.
– ¿Y todo esto como impacta en el armado del próximo equipo?
– Hay una realidad económica que no escapa a nadie y en cierto punto nos limita. Esto no quiere decir que el rumbo que estamos tomando con total convencimiento nos lleve a descuidar el armado del equipo. Más allá de los nombres, que como dije no aseguran demasiado, queremos que la gente se identifique con el equipo.
– ¿Qué puede decir del plan de obras que se lleva adelante?
– Esta gestión ha priorizado la infraestructura desde un comienzo. Hoy tenemos casi concluida la reconversión lumínica de las canchas externas y del predio en general con lámparas leds. Además estamos en la etapa final del piso deportivo en el playón de ingreso que tendrá un acabado perfecto con pintura poliuretanica resistente a las altas temperaturas. Esto nos permitirá brindarle mayor comodidad a las disciplinas formativas que se practican. Por otra parte estamos terminando un sector de oficinas en adyacencias al estadio donde funcionará una sala de prensa con todo el equipamiento necesario, no solo para nuestro departamento de comunicación, sino para aquellos periodistas que quieran utilizarla los días de partido. Una sala de reuniones, dos consultorios para nutrición y psicología y una oficina para las formativas.
– Tiempos de muchos desafíos.
– Así es, queremos trascender por lo que somos como institución social y deportiva más allá del básquet profesional. Si bien faltan poco más de tres años ya estamos enfocados en el centenario del club y queremos llegar consolidados. La idea es continuar recuperando a nuestros socios e invitando a que se acerquen aquellos que confían en nuestro proyecto. En ello estamos enfocados.
Fuente: Dpto. de Prensa del Club Olímpico
