Personal de Bromatología de la Municipalidad de Quimilí procedió, este domingo, a la clausura de una despensa del barrio Calazans por violar las restricciones establecidas en el decreto de necesidad y urgente vigente para toda la provincia. Se constató la venta de bebidas alcohólicas en horas de la madrugada.
Ante la clara violación a las medidas adoptadas por el Comité de Emergencia de Quimilí se procedió a la clausura preventiva del establecimiento, para luego seguir con los pasos administrativos que podrían derivar en el cierre durante un tiempo determinado, además de la multa correspondiente.
El personal municipal, acompañado por la policía, procedió a la notificación del procedimiento al propietario del negocio, de apellido Carrizo.
Vale recordar que en resguardo de la población se ajustaron los controles en toda la ciudad, para hacer cumplir los horarios de circulación, como también la actividad comercial.
Desde el Ejecutivo se pidió comprensión ante la emergencia sanitaria y colaboración a todos los vecinos para salir de esta situación lo antes posible.