El lugar de encuentro fue algo inédito en el reinado de Isabel II, ya que por protocolo debe realizarse en el Palacio de Buckingham, pero sus problemas de salud limitan su movilidad.
Las primeras medidas de Liz Truss
Liz Truss, la 56ª primera ministra de Reino Unido y la tercera mujer en ostentar ese cargo tras Margaret Thatcher y Theresa May, pronunciará un discurso ante la nación por la tarde antes de comenzar a designar a su gabinete.
De acuerdo a The Guardian, se espera que uno de sus primeros actos importantes como primera ministra sea el anuncio de medidas para paliar la crisis de los precios de la energía. Un paquete de 100.000 millones de libras esterlinas para congelar las facturas está en discusión.
Las ayudas llegarían el jueves y se espera que se paguen mediante préstamos adicionales, en lugar de un impuesto sobre las ganancias inesperadas a los proveedores como propuso el Partido Laborista.
El adiós de Boris Johnson
Boris Johnson prometió su «apoyo más ferviente» a su sucesora, Liz Truss, horas antes de pasarle el poder este martes, poniendo fin a un mandato marcado por el Brexit y la pandemia, que terminó bajo la presión de los escándalos.
El líder conservador, de 58 años, obligado a dimitir a principios de julio por sus propios diputados indignados, se despidió a primera hora de la mañana a las puertas de Downing Street ante una multitud de seguidores y familiares.
Hizo balance de sus tres años de mandato, recordando que logró en 2019 la más importante mayoría conservadora desde 1987 con la promesa de realizar un Brexit que parecía imposible tras años de caos político.
Desde «la más rápida distribución en Europa de vacunas» contra el Covid-19, hasta la «temprana entrega de armas a las fuerzas ucranianas» contra la invasión rusa, pasando por «un desempleo en mínimos nunca vistos desde que tenía 10 años», repasó uno a uno sus logros.
«Soy como uno de esos cohetes impulsores que ha cumplido su función y ahora volveré a entrar suavemente en la atmósfera y me sumergiré invisiblemente en algún rincón remoto y oscuro del Pacífico» y «ofreceré a este gobierno solo mi apoyo más ferviente», aseguró.
Tras su último discurso, de apenas siete minutos, emprendió viaje hacia la residencia escocesa de la reina Isabel II, en Balmoral, donde presentó oficialmente su renuncia.
