Dirigentes radicales de todo el país, reunidos hoy en una cumbre partidaria en la capital jujeña, respaldaron al gobernador Gerardo Morales tras las acusaciones de organismos internacionales y del kirchnerismo por el caso Milagro Sala.
«Es una payasada el pedido de intervención y desnuda un intento de desestabilizar la provincia», sostuvo el titular del Comité Nacional de la UCR e intendente de la ciudad de Santa Fe, José Corral, en el inicio de una rueda de prensa ofrecida este mediodía en la capital jujeña.
Allí, en el hotel Altos de La Viña, se dieron cita desde la mañana junto a Corral y al gobernador Morales, los presidentes de los bloques de Cambiemos en el Senado, Angel Rozas, y en Diputados, Mario Negri; la presidenta de la Convención Nacional de la UCR, Lilia Puig; el ex senador Ernesto Sanz; el vicegobernador de Buenos Aires, Daniel Salvador; y unos 200 legisladores y funcionarios radicales.
El titular de la UCR fue el encargado de transmitir el respaldo del partido a Morales y de cuestionar el pedido de intervención federal a la provincia presentado por diputados kirchneristas: «Deberían haberlo denunciado cuando había un estado paralelo comandado por Sala, porque nadie protegió a sus víctimas», se quejó Corral.
Reunidos en una demostración de fuerza y de unidad, los radicales pidieron que todos los espacios políticos manifiesten su repudio al pedido del kirchnerismo de intervenir los tres poderes de la provincia.
El más duro fue el diputado Mario Negri, que reclamó «rotundas expresiones de repudio de todas las fuerzas políticas al pedido de intervención». «Incluyo al propio Gobierno que estoy seguro que lo hará», agregó Negri, en lo que pareció un mensaje ya chequeado con la Casa Rosada.
El otro reclamo de los radicales fue para los organismos internacionales, como la OEA y la CIDH, que habían pedido la libertad de la dirigente social.
«Como ciudadano me siento avergonzado por las manifestaciones del Secretario de la OEA. Nunca en los anales del organismo un presidente ha expresado una opinión política personal antes de terminar los protocolos de investigación. Esto fue producto de una manipulación política y le hace un gran daño a esa institución», señaló Rozas ante la prensa.
Los radicales también machacaron sobre las que, a su modo de ver, son las verdaderas intenciones detrás de la defensa de Sala: «Empezamos de desnudar una matriz sistémica de corrupción y la verdadera intención del kirchnerismo es frenar ese proceso, porque todo esto tiene su capítulo central en la ex presidenta», apuntó Morales en referencia a Cristina Kirchner.
Para Puig, presidenta de la Convención Nacional, «Jujuy es el punto de partida del fin de los regímenes feudales del pais», por eso provoca ataques del gobierno anterior.
Además, la parlamentaria del Mercosur hizo un alegato recordando la historia del radicalismo en defensa de los derechos humanos. «El Gobierno de Morales representa al radicalismo de la defensa de los derechos humanos y de la Conadep, y los que nos atacan son los mismo personajes que nos atacaban en la década del ´70», concluyó.
Fuente: Telam