Y agregó: «Estamos haciendo con la gobernadora (María Eugenia Vidal) un esfuerzo enorme para bajar esta tendencia de los últimos años, donde el homicidio doloso ha aumentado de manera exponencial».
Ritondo dijo que cuando, a pesar del esfuerzo, se entera de casos como los sucedidos a Espíndola, al docente de artes plásticas Manuel Miranda, asesinado en San Martín, o al prefecto Rosario Toledo (60), ejecutado frente a su familia en Tigre, se pone «muy triste» y siente un «dolor enorme».
«Más cuando además uno ve que quienes fueron tendrían que estar presos…le pido a la Justicia que colabore, que no esté ene la calle quien no tiene que estar, que esté preso para que no vuela a matar», añadió el ministro.
Sobre su relación con el Poder Judicial, Ritondo aseguró que es de diálogo permanente, aunque dijo que hay jueces que piensan que las garantías son para los ciudadanos y otros que son solo para los delincuentes.
Fuente: Telam