No la pasó bien River ante Patronato. Para nada bien: perdió 3 a 1 y sigue sin poder levantar cabeza, todo lo contrario, se hunde cada vez más en su «trauma post-Madrid». Volvió a caer: tres cachetazos en menos de diez días, todos en el Monumental ante su gente. Tras la victoria ante Boca en diciembre, los festejos, la obtención del a Copa Libertadores, el equipo de Gallardo fue al Mundial de Clubes (quedó eliminado en el primer partido) y luego entró en este estado de «conmoción».
Sin Pity Martínez y Maidana en el club, el Millonario luce desconcertado. Viene de caer ante Defensa y Justicia por 1 a 0 y ante Unión 2 a 1, en los dos partidos que tenía pendiente por la Superliga.
Patronato, el conjunto que está entreverado en la parte baja de la tabla de los promedios y lucha por no descender, aprovechó todas las invitaciones y licencias que otorgó un elenco «millonario» alternativo para festejar un triunfo histórico. Y valioso.
El atacante paraguayo Gabriel Ávalos (ex Crucero del Norte de Posadas, Nueva Chicago y Godoy Cruz de Mendoza) resultó el héroe de los dirigidos por Mario Sciacqua. El atacante «rojinegro» convirtió sucesivamente a los 12m. y 35m. de la primera parte, además de facturar el tercero, a los 8m. del complemento. El pibe Cristian Ferreira (St. 18m.) descontó.
Más allá de las ventajas lógicas que entregó por incluir una alineación casi sin rodaje anterior, River volvió a mostrar fragilidad defensiva, siendo permeable a cualquier ataque visitante. Como un boxeador frágil de mandíbula que cae ante el primer golpe. Eso le ocurrió a los 12 minutos, cuando Avalos empezó a redondear su tarde de gloria, con un remate bajo y cruzado, tras una equivocación de Bruno Zuculini. Aun cuando asumió las riendas del cotejo, el equipo del ‘Muñeco’ Gallardo volvió a exhibir falta de fluidez en el traslado y bastante repetición a la hora de atacar: así resumió todo a centros desde cualquier punto del campo y simplificó la tarea de la defensa «rojinegra». Sobre los 35m., la fórmula «Compagnucci-Avalos» rindió sus frutos. El volante, ex Unión, mandó centro desde la derecha y el goleador se elevó más alto que todos para conectar y batir a Germán Lux. En la reanudación, los ingresos de Leonardo Ponzio (uno de los titulares a disposición del DT) y del pibe Alan Marcel Picazzo no entregaron la frescura deseada. Y en una contra rápida, otro pase de Compagnucci a Avalos permitió otra lucida definición del delantero y el triplete consumado.
El marcador ya era cuesta arriba para los «millonarios». River llegó al descuento a los 18m., con un zapatazo de Ferreira, que batió la estirada del experimentado Sebastián Bértoli. El equipo local siguió intentando, pero no encontró la claridad suficiente como para achicar las cifras siquiera.
Así, el público local (que no acompañó en número como en otras jornadas) mostró incredulidad por un nuevo resultado adverso. Y Patronato, de la mano de un criterioso DT como Mario Sciacqua, se llevó una victoria que tonifica el alma, además de sumar centésimas jugosas para el promedio.