Roberto Lavagna planteó los principales problemas que hay que resolver en la Argentina y se refirió a la posibilidad de caer en una hiperinflación ante el contexto de inestabilidad económica. Si bien expresó que no lo ve “como algo cercano”, alertó que “si el gobierno comete errores y la oposición actúa con irresponsabilidad, los riesgos están”.
“La realidad emerge, no hay como ocultarla», analizó de manera crítica el candidato a presidente de Consenso Federal quien expresó que lo primero que deberá hacer el próximo gobierno es “empezar por la grieta”. En diálogo con TN, recordó cómo se superó la crisis del 2001: “Si se pudieron hacer muchas cosas fue a partir del ex presidente Duhalde (Eduardo), Alfonsín (Raúl), la iglesia católica y el resto de los credos, el diálogo argentino creó un marco de contención. A pesar de que nadie tenia mayoría en el Congreso las medias salían por consenso”, sostuvo Lavagna.
Consultado por si las próximas medidas deberán profundizar el ajuste, cuestionó: “Con 34% de pobreza, niveles de desempleo de dos dígitos, a quién se le puede ocurrir más ajuste”. El ex ministro de Economía agregó que “la herencia que recibió Macri era mala y la que deja es peor. La pobreza es más alta, la inflación 20 puntos más que el período anterior, y vuelve a aparecer ese monstruo casi permanente de la deuda».
“Hemos vivido cuatro años de shock financiero, como en la época de Menem (Carlos) y Cavallo (Domingo)”, comparó y resaltó la necesidad de “modificar totalmente la visión y ver cómo uno genera un shock productivo, que casi es lo contrario del financiero”.
Lavagna también se refirió a la posibilidad de que la Argentina entre en un contexto hiperinflacionario. Si bien expresó que “no pareciera ser el problema en este momento, no lo veo como algo cercano, por supuesto que si el Gobierno comete errores, y la oposición actúa con irresponsabilidad, los riesgos están”. De todas maneras sostuvo que “el problema inminente es un país estancado”.
Al respecto del desembolso de 5.400 millones de dólares que el FMI debe hacerle a la Argentina, el candidato presidencial expresó que “se va a producir después de las elecciones, salvo que alguien cometa un error muy grande; Macri o Fernández, o los dos juntos porque se retroalimentan”, cargó contra sus contrincantes. “El desembolso no tiene que ser para que se sigan fugando capitales, que se use para recomprar deuda que Argentina emitió”, explayó el economista.
Consultado por los constantes llamados públicos de Alberto Fernández para que ocupe un cargo en el Ministerio de Economía, Lavagna fue tajante: “Soy candidato a presidente, punto. Mi compromiso con Consenso Federal es que crezca en el futuro, somos una alternativa al cristinismo, más potable que este gobierno desgastado que fracasó».
