El camino de Juan Martín del Potro en su regreso a Roland Garros tras cinco años de ausencia tuvo su punto final luego de caer por 7-6 (8), 7-5 y 6-0 ante el escocés Andy Murray en tercera rueda. El tandilense fue de mayor a menor en un partido que se extendió por dos horas y 53 minutos de juego.
Del Potro, que no jugaba en Roland Garros desde 2012, tuvo cuatro pelotas de set en el primer parcial, dos de ellas al servicio, pero las desperdició y acabó despidiéndose del segundo Grand Slam de la temporada en tercera rueda.
Luego de sus victorias ante Guido Pella y el español Nicolás Almagro (por abandono), el tandilense sucumbió ante el actual número uno del mundo luego de tener dos grandes primeros sets y aflojar tanto anímica como físicamente en el tercero y último.
El partido fue un reflejo de la situación de Del Potro tras el calvario que pasó con la muñeca izquierda. Tiene una de las mejores derechas del circuito y en forma es capaz de luchar mano a mano con los mejores, pero su revés es un punto muy débil y el cuerpo aún no aguanta maratones.
El duelo entre Murray y Del Potro era el más esperado de la jornada en la arcilla de París tras los dos espectaculares encuentros que jugaron en 2016. Y el estadio Philippe Chatrier disfrutó con el duelo de estilos del británico y el argentino.
No fue la final olímpica de Río 2016 -cuando Murray venció 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5- ni la semifinal de la Davis un mes después -cuando Del Potro se tomó la revancha con un 6-4, 5-7, 6-7 (5-7), 6-3 y 6-4 en el que acabó casi cojo-, pero el partido de hoy ofreció buenas dosis de emoción.
«Con Andy jugamos grandes batallas el año pasado, una para cada uno», recordó en la previa Del Potro. «Podría ser una gran batalla de nuevo si me siento bien».
El tandilense, campeón del US Open 2009, acabó la ronda anterior con problemas en el muslo derecho. No hubo rastro de ello, al menos en los dos primeros sets. Pero fueron tan extenuantes, 87 minutos el primero y 58 el segundo, que Del Potro se quedó sin gasolina.
El primero lo tuvo prácticamente en su mano. Tuvo un set point devolviendo con 5-3 y después otro con su saque en 5-4. Resistió Murray, que se colocó 6-4 en el tie break, pero Del Potro salvó esas dos oportunidades y se procuró de nuevo otras dos bolas para atar el primer parcial. En la primera cometió una doble falta y en la segunda Murray conectó un winner de derecha.
El británico rompió en el inicio del segundo set y llegó con esa ventaja hasta el 5-4. Ahí, sacando para colocar el 2-0, el público de la Philippe Chatrier empezó a alentar al argentino. «íDelpo, Delpo, Delpo!», coreaban los hinchas. Y «Delpo» rompió el saque de su rival.
Ahí se acabó el argentino. Lo que siguió fueron ocho juegos consecutivos de Murray para poner fin al partido. Acabado el encuentro, los aficionados seguían ovacionando a Del Potro, que abandonó la cancha con un cálido aplauso.
