El docente de una escuela de Rosario que fue acusado de manosear el viernes pasado a una alumna de 10 años y amenazarla para que no cuente el episodio, fue imputado ayer de cometer abuso sexual grave y ultrajante y se le impuso además una prisión preventiva por 40 días.
La madre de la menor, que asiste a clases a la Escuela 1202 “Gendarmería Nacional”, denunció el viernes pasado que su hija fue encerrada en un baño por un docente de lengua, quien la manoseó en distintas partes del cuerpo y luego la amenazó con un cuchillo y le advirtió que mataría a la madre o al hermano, que concurre a la misma escuela, si contaba algo de lo sucedido.
Al docente, de 52 años, se lo acusó de dos amenazas coactivas, abuso simple agravado por ser cometido por el educador de la menor y abuso gravemente ultrajante cometido por un agente de la educación. En la audiencia imputativa el docente dijo no saber de lo que se lo acusa e indicó además que ni siquiera sabe dónde queda el baño de la institución escolar.
Aunque no tenía antecedentes penales se investiga si había protagonizado algún episodio de inconducta en otro colegio. “La escala penal del hecho más grave imputado arranca en ocho años de prisión”, indicó el fiscal del caso, Matías Ocariz.
Mauro Aguilar