En Sábado Show, el programa que conduce José María Listorti, los hermanos Lucía y Joaquín Galán recorrieron sus 30 años de trayectoria en la música.
El popular dúo, con más de 23 discos editados y reconocidos en Estados Unidos, Europa y Latinoamérica, disfrutó de una noche dedicada a sus recuerdos y conciertos, en los que compartieron escenario con figuras de la talla de Diango, Valeria Lynch y Los Nocheros, entre otros.
El comienzo de Pimpinela, podría decirse, fue gracias a la mamá de los cantantes, que les insistió para que formaran un dúo, según contó Joaquín. En tanto, Lucía admitió que el primer concierto fue un «verdadero desastre».
Sin embargo, fue la televisión la que les dio popularidad cuando sonó el hit Vete y pega la vuelta, cuyo disco vendió más de un millón de copias. El éxito de los hermanos les permitió incursionar en la actuación como protagonistas en la novela El Duende Azul.
Como cierre de la primera parte del homenaje, figuras como Enrique Pinti, Oscar Mediavilla, Eugenia Tobal, Florencia Peña y sus seres queridos dejaron mensajes de cariño y reconocimiento a los Pimpinela.
A continuación, los hermanos recordaron su paso por el Radio City Music Hall y el Madison Square Garden de Nueva York. “Esos conciertos fueron increíbles y fuimos los únicos argentinos que cantamos ahí, así que fue un orgullo para nosotros”, coincidieron.
La parte más emotiva del programa quizá estuvo cuando repasaron los problemas de salud que tuvo Lucía en 2006, cuando tuvo un leve ACV. Este episodio mantuvo a su familia unida y es por eso decidieron llamar a su obra de teatro de la calle Corrientes La Familia. “Sin ellos (mis hijos) no podríamos haber hecho esto. Somos una familia muy de acompañar y sostener”, remarcó la cantante.
Por otro lado, la producción del ciclo mostró el lado solidario de los Pimpinela, que presiden una fundación que alimenta y ayuda psicológicamente a chicos de la calle y con síndrome de down.
Antes de despedirse, los hermanos regalaron a la audiencia un increíble musical con el tema Brindo por la familia. Por supuesto, brindaron y soplaron las 30 velitas por su aniversario.
