El estudiante de abogacía había ido a cenar al restaurante Kalika junto a dos amigos. Tras terminar la comida, salieron y se quedaron hablando en las escaleras de la entrada.
Cuando ya estaban por irse, apareció un grupo de hombres que, al entrar al establecimiento, los empujaron e insultaron. Indignados, los tres jóvenes entraron para recriminarles por su actitud. Entonces comenzó la guerra de sillazos.
Fuente: Infobae