Mauricio Macri mantuvo este lunes por la tarde una reunión fuera de agenda con su equipo económico en la Casa Rosada para monitorear el pulso de la economía y la reacción de los mercados tras la batería de anuncios realizados el viernes pasado en pleno sacudón por la crecida del dólar.
El Presidente estuvo cerca de una hora y media con los ministros Nicolás Dujovne, Luis Caputo, Francisco Cabrera y Juan José Aranguren, además del presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, deja la Casa Rosada. (Foto: Mario Quinteros)
«El análisis por las primeras reacciones del mercado es satisfactorio», dijeron voceros del equipo económico a Clarín.
Desde el Gobierno advirtieron que, dado el comportamiento que se vio este lunes, no se contemplan nuevos anuncios económicos para el futuro cercano.
Por otro lado, en sintonía con las declaraciones de Dujovne de las últimas horas, consideraron que la suba del dólar no tendrá un impacto inmediato en la inflación, sino que estiman que el alza será gradual.
Si bien las estimaciones prevén que el indicador de inflación de abril cerraría por arriba de las previsiones, la tendencia se estabilizaría hacia la baja a partir de mayo.
El encuentro, que en el Gobierno dijeron que forma parte de la agenda semanal habitual, sumó volumen y expectativa porque participó el presidente.
En paralelo, en la Casa Rosada, se desarrolló la reunión de la mesa nacional de Cambiemos, coordinada por el jefe de gabinete, Marcos Peña. Apenas finalizó el encuentro con el grueso del gabinete económico, Macri se sumó al cónclave partidario.
Por la mañana, Macri había encabezado en Olivos otra cita, en ese caso de «mesa chica», donde participaron -como es de rigor- la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
El lunes, tras los temblores del miércoles y jueves pasado, el dólar cerró a $ 22,33, en los niveles del viernes. El dato confirmó, en ese segmento, el alivio que cruzó al gobierno durante el fin de semana pero empiezan a aparecer otras señales de alarma, en particular con el indicador de inflación.
Clarín