Lionel Scaloni viajó, este sábado, a Mallorca donde reside desde hace varios años, en medio de la incertidumbre sobre su futuro en la Selección Argentina. El entrenador, que durante algunos días descansó con su familia en Pujato, se embarcó junto a Walter Samuel en el aeropuerto de Córdoba.
Hasta el momento, su idea sería no asistir al sorteo de la Copa América: se realizará el 7 de diciembre en Miami y único representante del cuerpo técnico sería Luis Martín (preparador físico). Esta decisión no hace más que aumentar los interrogantes que se abrieron tras sus declaraciones en el Maracaná.
Desde aquella tormentosa conferencia de prensa apenas concretado el triunfo sobre Brasil, el entrenador no mantuvo conversaciones con Claudio Tapia. La única charla fue entre el propio Scaloni y sus colaboradores, aunque no trascendió absolutamente nada que pueda clarificar este misterioso panorama.
El director técnico renovó su contrato a principios de este año hasta 2026 después de una negociación que se dilató más de la cuenta. Cuando nadie lo esperaba, y sin avisarles a jugadores y dirigentes, sus palabras fueron un verdadero baldazo de agua fría en el mismísimo Maracaná.
«Tengo muchas cosas que pensar en este tiempo. Estos jugadores me han dado un montón, nos han dado un montón a todo el cuerpo técnico y necesito pensar. Necesito pensar mucho que voy a hacer. No es un adiós ni mucha cosa pero necesito pensar, porque la vara está muy alta, está complicado seguir ganando y estos chicos lo ponen difícil. Toca pensar este tiempo, se lo diré al presidente (Claudio Tapia) y se lo diré a los jugadores después porque esta Selección necesita un entrenador que tenga todas las energías posibles, que esté bien»
La renovación de su contrato: el vínculo se extendió hasta la finalización del Mundial 2026, pero las negociaciones no fueron sencillas y generaron un gran desgaste. Incluso, no llegaron con los números acordados a la Copa del Mundo de Qatar 2022 y esto también había provocado incertidumbre.
El desgaste en la relación con los dirigentes: comenzó con lo relacionado a la extensión del vínculo, pero luego surgieron diferentes cuestiones de logística. Por ejemplo, la programación de partidos amistosos ante rivales que para Scaloni no aportaban demasiado.
El retraso en el pago: si bien hubo algunas demoras para cobrar los premios por haber ganado el Mundial 2022, desde el círculo íntimo del cuerpo técnico aseguraron que este no es un motivo determinante para que surgieran dudas. Sin embargo, reconocieron que sumó malestar.
Fuente: tyc sports
