Cuatro personas han muerto y hay además varios heridos tras el derrumbe este sábado de una grúa de la construcción en Seattle (oeste de EEUU) sobre vehículos y transeúntes.
Dos de los muertos eran trabajadores que se encontraban en la grúa y los otros dos eran personas que se encontraban en sus vehículos en el lugar del accidente, indicó Harold Scoggins, jefe de bomberos de Seattle.
Otras cuatro personas resultaron heridas, pero se encuentran en situación estable y no se teme por su vida.
La grúa formaba parte del equipo de construcción del nuevo campus de Google en la ciudad.
«Fue terrorífico. La grúa se partió en dos. Una mitad se quedó colgando y la otra cayó sobre la calle», dijo Esther Nelson, testigo de lo ocurrido, en declaraciones al diario local Seattle Times.
La alcaldesa de la ciudad, Jenny Durkan, afirmó que se había tratado de un día trágico en Seattle, pero remarcó en un comunicado que también se vieron «milagros, como una mujer y su hijo pequeño cuyo coche fue golpeado por la grúa pero sobrevivieron».
Por ahora, no se han identificado las causas del accidente.
