Este domingo, llegó a su fin la Jornada de Evangelización encabezada por el padre Darío Betancourt. En su última prédica instó a los fieles a invitar a Jesús a sus vidas, y a renovar su entrega hacia él.
Durante dos días el sacerdote, oriundo de Colombia, convocó a miles de fieles católicos como así también de religiosos de iglesias evangélicas, quienes colmaron el Nodo Tecnológico para alabar a Dios y proclamar que «Jesús está vivo».
En la jornada de este domingo, durante la mañana y por tres horas Betancourt disertó sobre distintos aspectos de la Biblia y cómo la Palabra del Señor libera de las ataduras a las personas que están sometidas.
En ese sentido, el sacerdote invitó a los presentes a despojarse de todas las cosas que no vienen de Dios como por ejemplo las cintas de color rojo, amuletos entre otros elementos que no hacen otra cosa, «que alejarnos del Señor. Después nos preguntamos por qué Dios no me escucha…».
Tras un intervalo, el padre Darío subió nuevamente al escenario para encabezar la última parte de la jornada. En primera instancia retomó el análisis de la Biblia y también se refirió al poder de la oración.
Luego realizó la imposición de manos a las miles de personas que se dieron cita. Fue un momento sublime, de gran espiritualidad. Durante ese lapso, muchos fieles recibieron la bendición de Dios.
Para concluir, el sacerdote presidió la Santa Misa. En la ocasión se leyó el evangelio referido al camino de Emaús.
Al reflexionar sobre el mensaje de Jesús destacó, «los discípulos caminaban y discutían entre ellos sobre lo que había pasado; y Jesús los alcanzó. Ellos no se dieron cuenta que era el Señor».
«Por qué no se dieron cuenta que era Jesús, porque había algo que les impedía darse cuenta. Yo pienso, que ellos dudaron. María Magdalena lo vio resucitado, Pedro también lo vio y estos par de discípulos dudaron», expresó Betancourt.
Seguidamente consignó, «la duda es del diablo. ¿Por qué Dios no me responde?, porque dudamos de él. Aarón murió en el monte al igual que Moisés, ninguno de ellos entró a la tierra prometida. Si ellos no entraron, qué piensan ustedes que el Señor nos puede decir».
«Jesús está todos los días con nosotros y cuánto dudamos. La pregunta es, qué te impide ver a Jesús. Para mí, nosotros no podemos ver al Señor por culpa del pecado», especificó y añadió, «cuánto llora Dios ante la mala conducta de sus hijos».
Por otra parte el sacerdote también planteó que cosas impiden que Dios nos bendiga. A lo que explicó, «Jesús no entra en nosotros si nosotros no lo invitamos. Es una invitación especial. Es cierto que nosotros, a través del Bautismo lo invitamos al Señor a entrar a nuestras vidas, pero es necesario renovar esa invitación».
A la vez sentenció, «si quieres sentir, ver, experimentar y oír a Jesús debes invitarlo y renovar tu entrega».
Luego afirmó, «el día que dejes de venir a buscar a Jesús, llegará la duda».
Finalmente el padre Betancourt realizó una oración por todos los enfermos y su intersección fue tan fuerte que muchos de los presentes fueron bendecidos por Dios.
Antes de retirarse, el sacerdote agradeció el cariño de todos los presentes e instó a las personas que recibieron sanación a dar testimonios en cada una de sus comunidades.
Cabe mencionar que Darío Betancourt viajará este martes a la ciudad de Sumampa donde encabezará una jornada de evangelización. De esta manera concluirá su visita a la provincia de Santiago del Estero.
