El primer grito de River, de Rodrigo Mora, llegó con polémica. Y es que la pelota había abandonado los límites del campo de juego instantes antes de que Lucas Pratto mande un centró atrás para la aparición goleadora de uruguayo de 30. Iban 22 minutos de la primera parte.
La jugada es fina, es cierto. Pero en las repeticiones se puede observar cómo el balón traspasa apenas unos milímetros la línea de fondo. Los jugadores de San Martín de San Juan protestaron y Claudio Mosca fue amonestado.
Ocurrió algo particular, además: cuatro minutos antes del tanto de Mora -que festejó como si fuese un pescador-, Germán Delfino le anuló un gol a Ignacio Scocco luego de un centro de Nacho Fernández, desde el mismo lugar que envió el pase Pratto para Mora. También la pelota estaba unos centímetros afuera antes de que lo impacte Fernández.
Y el tercer gol también llegó con polémica. Fue otra jugada de VAR, sin dudas. Iban 4 minutos cuando Rodrigo Mora presionó y recuperó. El uruguayo se anticipó a Facundo Erpen, que fue al piso tratando de llegar primero. Mora toca con sutileza el balón, elevándola, y el defensor sanjuanino alcanza a rozarlo. La pelota le toca en la mano a Mora, que después define. Mano hubo, ¿pero fue intencional? Da para el debate
Fuente: Clarín