Dueña de unas curvas exuberantes, Sol Pérez se mostró más sincera que nunca a la hora de hablar sobre su cuerpo, sus entrenamientos y cómo utiliza su trabajo para canalizar sus inseguridades.
“A veces me miro al espejo y me veo fea, soy muy insegura”, reveló Sol y se refirió a cómo las opiniones ajenas afectaron sobre su autoestima: “Siento que también esa inseguridad es alimentada por los otros, por eso también voy tanto al gimnasio. A mí me gusta tener un cuerpo fitness y entreno todos los días para eso”.
En ese sentido, continuó: “Soy muy exigente con mi cuerpo, dejo de entrenar y siento que me desinflo de a poco. Sin embargo, creo que la mirada del otro influye cada vez menos. Te mentiría si digo que no me importa nada. Es complicado porque soy bastante insegura, pero intento canalizarlo siendo muy obsesiva con mi trabajo”.
La modelo también recordó que antes de los entrenamientos “de chica era muy chiquitita y flaquita, por ende, era muy chatita y por eso me operé las lolas”, sin embargo, en diálogo con Agarrate Catalina aseguró que fue el único retoque que se realizó al considerarse en contra de las cirugías estéticas. En ese sentido, puso énfasis en la alimentación como pilar fundamental para la salud: “Creo que hay una cuestión fundamental en la alimentación, aprendí a comer mejor porque vivía con dolor de panza”.
