Fue una paliza. Godoy Cruz le ganó 5-0 a San Lorenzo, en el Nuevo Gasómetro, y le dio una clase de fútbol. Le enseñó que para pelear los campeonatos hay que ser protagonista. Algo que el Ciclón no tuvo presente durante todo el partido.
Los hinchas, que pese a la derrota aplaudieron al equipo en la cancha, tuvieron que soportar a un equipo ampliamente dominado. Parece que la posibilidad de alcanzar a Boca asustó a los jugadores azulgrana que tuvieron un nivel muy malo. Sobre todo el arquero, Nicolás Navarro, gran protagonista de este equipo, que hoy cometió errores de principiante: no salió en el centro del segundo gol y se comió el tirito de Luciano Abecasis.
También fue muy malo lo de la defensa. Ni Caruzzo ni Coloccini mostraron la firmeza de otros partidos. De hecho, el primer gol del partido, llega con un gol en contra de Caruzzo, después de un centro raso.
Muy pobre fue lo del Pipi Romagnoli que está más cerca del retiro que de ser jugador profesional de San Lorenzo. Juega poco y encima no aprovecha las oportunidades. Fue reemplazado a los 5 minutos del segundo tiempo.
Godoy Cruz hizo lo que tenía que hacer. Mostró el mismo volumen de juego que durante el todo el campeonato. Un equipo ordenado, con un mediocampo al que le gusta manejar los tiempos y una delantera letal, comandada por el Morro García, una pesadilla para los defensores.
Con esta victoria, el Tomba se ubica en segundo lugar, con 43 puntos y a siete de Boca. Además, tiene casi asegurado un lugar en la Libertadores del año próximo.
