Susana Malcorra fue una de las sorpresas del gabinete de Mauricio Macri por ser desconocida para gran parte de la opinión pública. Y según explica, ella misma también también se sorprendió cuando el presidente electo la llamó para ofrecerle la Cancillería: «Le dije que era un honor pero que tenía que hablar con él y verlo cara a cara para entender el proyecto. Me fui a Buenos Aires el sábado de la semana pasada y ahí recién fue que empecé a digerir está idea y dos días después le dije que sí».
En sus primeras declaraciones tras su designación, Malcorra detalló sus aspiraciones con la política exterior: «Es una política de Estado que representa a todos los argentinos. Hay que lograr que sea una política que represente a la argentina en su potencialidad y enorme capacidad creadora. Es una plataforma de integración y hay que usarla no dejando nada de lado».
«Hay que ver las cosas que la sirven a la Argentina y usar el trampolín que las distintas asociaciones tienen.Mercosur, Unasur, Unión Europea, Estados Unidos, China, África, el Pacífico, todas son oportunidades para argentina. El objetivo es que Argentina pueda trabajar bien y conectada por el mundo se abran nuevos planos que den mayor trabajo a la gente», explicó en una entrevista con el canal TN.
Asimismo, contó que lo que la convenció de la propuesta de Macri fue que aspiraba «tener una perspectiva de afuera hacia adentro y no de adentro hacia afuera» de la Argentina con el mundo.
Con respecto a sus conversaciones con el actual canciller, Héctor Timerman, reveló: «Me llamó inmediatamente después del anuncio de una manera muy positiva. Me dijo que estaba disponible a reunirse conmigo, que todo el equipo estaba disponible. Yo lo llamé y convenimos una reunión. El trabajo ha sido muy positivo, ha sido absolutamente alentador y ha funcionado muy bien».
Consciente de su desconocimiento en la opinión pública, se describió humildemente como «una persona muy normal con 25 años de experiencia en el sector privado» y que luego de la crisis del 2001 «tenía como pendiente hacer algo distinto y se dio la oportunidad de entrar a la ONU». Y sentenció: «Mi característica más grande es que soy una laburante».
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