La colombiana Tatiana Calderón es la única mujer latinoamericana en llegar a la Fórmula 1, un deporte tildado de machista en el que sólo un puñado de competidores puede hacerse con un lugar.
Con 24 años, la piloto formará parte de la escudería Sauber, pero desde los nueve debió pasar por muchas pruebas para hacerse respetar, antes de alcanzar uno de sus sueños.
¿Cómo nació su pasión por el automovilismo?
– A mí siempre me gustaron mucho los deportes. Practiqué tenis, fútbol y equitación, antes de que mi hermana me haya llevado a una pista de alquiler de karts, cerca de mi casa, en donde comprabas turnos de cinco minutos. Me encantó. Íbamos todos los días después del colegio y convencimos a mis padres para que me compren un kart y empezar a competir de forma más profesional en el kartodromo Juan Pablo Montoya, a los nueve años.
Siempre está la creencia de que una mujer no puede ser tan rápida como un hombre.
¿Cómo fue el camino que transitó para llegar a la escudería Sauber de Fórmula 1?
– Varias veces fui campeona nacional de karts en Colombia, luego en un torneo de Estados Unidos. Después pasé a monoplazas, en la categoría que se llama Star Madza, que está dos pasos por debajo de la Indycar. Tras esa experiencia, mi sueño siempre fue la Fórmula 1 y me fui a Europa, en donde empecé a competir en la Fórmula española para, luego, hacer tres años en la fórmula 3 europea, en donde competí contra Max Verstappen y Pascal Wehrlein, entre otros de los nombres que están hoy en la máxima categoría. Finalmente, el año pasado estuve en la GP3 y fue allí donde hice contacto con Sauber, después de unas buenas carreras nos sentamos a ver cómo podíamos trabajar juntos y fue así como llegué a ser Piloto de desarrollo.
Cuando el semáforo esté en verde, acelera
¿Cree que el automovilismo es un ambiente machista, o existe respeto en cuanto a su participación?
– Creo que los tiempos van cambiando. En Sauber está Monisha Kaltenborn al frente del equipo y tiene a varias ingenieras, eso muestra que se están abriendo. Pero sí, predominan los hombres y el machismo y no ha sido fácil ganarse el respeto, tanto de la gente con la que trabajas como los ingenieros y tus competidores. Siempre está la creencia de que una mujer no puede ser tan rápida como un hombre.
¿Se sintió denigrada alguna vez por el sexo opuesto?
– En Colombia, cuando corrí mi primer campeonato Nacional. Venía gente de todas partes del país, y antes de sentarnos en los karts, un padre de uno de los competidores dijo: «Si esta niña les gana, yo le compro pelucas a todos». Yo terminé ganando, y la cara del padre cambió completamente. No cumplió con la promesa, pero se tuvo que comer las palabras. A los padres les duele mucho ver a su hijo perder con una mujer.
¿Y en Estados Unidos o Europa?
– Algún que otro ingeniero que por la radio me decía: «Cuando el semáforo esté en verde, acelera», como si no supiera las reglas, pero sólo me pasó en las primeras carreras.
¿Algún piloto intentó hacerle la carrera más difícil por ser mujer?
– Si, hubo varias veces que me tocó estrellarme para demostrarles que no me iba a asustar por ser mujer. Me tiraban el carro encima pensando en que yo iba a soltar el volante e irme de pista, a veces lo hacía para evitar un accidente tonto, para que mi carrera no se acabe allí. En varias carreras he sentido que fue así.
¿Qué sintió cuando consiguió su primera victoria sobre dos hombres? ¿Cómo reaccionó el entorno?
– Fue increíble, porque todo el esfuerzo y trabajo que he hecho valió la pena. El hecho de ser mujer llamó mucho la atención, incluso a veces aun sin ganar pero compartiendo el podio, se acordaban más de mí, que había salido tercera y no del ganador.
¿Existe alguna diferencia entre los hombres y las mujeres a la hora de competir?
– Existen diferencias en cuanto a la forma de pensar, creo que a veces los hombres actúan sin pensar o sin tener un plan, en ciertas circunstancias es bueno pero en otras no. Obviamente, en lo físico, a la mujer le toca trabajar un poco más para poder manejar el carro. De todas formas, los carros están diseñados un poco más para la ergonomía de un hombre. Igualmente creo que podemos competir de igual a igual y es uno de los únicos deportes en donde lo podemos hacer.
Max Verstappen es un piloto que es tildado por sus colegas de insolente y agresivo. ¿Era así cuando competía con usted?
– No ha cambiado. Competí todo el 2014 con él, en la Fórmula 3 y en la Florida Winter Series, y la verdad que tiene un talento increíble. Siempre se mantiene en lo que él cree que es correcto, no da el brazo a torcer nunca.
A los padres les duele mucho ver a su hijo perder con una mujer
¿Qué opinas de la relación que mantuvieron Lewis Hamilton y Nico Rosberg en el último Mundial?
Ambos fueron rivales desde muy pequeños en casi todas las categorías. Siempre estuvo Hamilton por delante y finalmente Nico por fin pudo ganar y quiso irse en lo más alto. Es respetable. Este año, con los cambios que se han hecho en la fórmula 1, creo que los equipos tendrán más oportunidades para unirse a la pelea y ojalá que podamos ver una competencia más pareja para que sea más emocionante.
¿Cómo se siente al ser sólo la quinta mujer en entrar a la élite de un deporte familiarizado con el sexo masculino? Y ¿Por qué cree que es tan complicado acceder a ella?
– Creo que no hay suficientes niñas que hayan empezado a andar en karts. Hace falta una referencia para que más mujeres tomen coraje para comenzar. Ojalá que yo pueda ser esa referencia, ya que en los últimos años Suzy Wolff abrió una puerta y demostró cosas muy positivas para la mujer.
¿Cómo es usted a la hora de sentarse al volante?
– Dependiendo de cómo me haya levantado, me gusta escuchar cierto tipo de música. Caliento físicamente 10 minutos y me subo al carro por el mismo lado, siempre.
¿Cuáles son las posibilidades de llegar a competir en un Gran Premio de Fórmula 1?
Yo creo que este paso ha sido muy importante, pero lo más difícil está por venir. Primero tendré que probar el coche, y si ellos me dieron esta oportunidad será porque creen que tengo el potencial para poder llegar a correr. Ahora está en mis manos demostrar lo que puedo hacer. Es difícil saber cuándo podré competir, porque en la Fórmula 1 no depende sólo del talento, sino de los recursos y estar en el momento apropiado.
Estamos viviendo cambios importantes dentro del deporte en cuanto a la participación de las mujeres. ¿Qué mensaje le daría a las mujeres que quieren incursionar en deportes tan familiarizados con el sexo masculino?
Para mí la clave siempre ha sido en creer que uno puede lograrlo, trabajando duro. La paciencia también es importante, porque no todo viene de la noche a la mañana y en este proceso hay que pasar por ciertas etapas. Trabajar por sus sueños sin rendirse nunca.