La ciudad de Formosa volvió a Fase 1 tras un rebrote de COVID-19. Así lo dispuso el Consejo de Atención Integral a la Emergencia luego de que se detectaran 23 casos en la provincia, de los cuales 17 corresponden a la capital provincial.
De esta manera, quedaron suspendidas todas las actividades de flexibilización que estaban vigentes y se restauró el aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) hasta el 18 de marzo próximo.
El resto de los casos se detectaron en la ciudad de Clorinda: 4 casos, 2 consultas por síntomas leves y 2 por búsqueda activa en terreno. En Palma Sola y en Pirané, se encontró 1 caso en cada localidad por búsqueda activa en terreno.
De acuerdo a las restricciones, quedaron suspendidas todas las actividades de flexibilización que estaban vigentes (cerraron nuevamente los locales comerciales que no sean esenciales), así como los certificados de circulación. Aquellas personas que se desempeñen en actividades esenciales deberán volver a tramitarlo.
Asimismo, se informó que el transporte interjurisdiccional quedó suspendido y el transporte urbano quedará a criterio de la Municipalidad de la ciudad de Formosa que en las próximas horas resolverá qué medidas tomar.
La decisión se tomó en medio de la polémica que envuelve al gobierno de Gildo Infrán a raíz de los operativos sanitarios ordenados por las autoridades, que no cumplirían con el respeto por los derechos humanos.
En este marco, la semana pasada, la Corte Suprema de Justicia emplazó al gobernador a que informe si sigue funcionando el centro deportivo adonde eran enviados los ciudadanos de Formosa sospechosos de tener COVID-19 y sus contactos estrechos y si existen más establecimientos como ese. También exhortó a la provincia a llevar un protocolo anticontagios respetando la Constitución Nacional.