Un bebé de tres meses murió de hambre en un hospital de la ciudad misionera de Oberá y por el caso fue detenida su madre, una joven de 18 años. Los testimonios recogidos hablan de un trasfondo de pobreza extrema, además de que la madre del bebé había intentado suicidarse pocos meses atrás.
El niño, llamado Brandon, había sido ingresado al Hospital Samic de Oberá sin signos vitales y una autopsia posterior arrojó que su muerte se produjo por inanición.
En el caso intervino el Juzgado de Instrucción número 1 de esta ciudad del sur misionero, que caratuló el caso como «abandono de persona seguida de muerte», mientras que ordenó la detención de la madre del pequeño.
Según el sitio Misionesonline, en el marco de investigaciones realizadas se pudo determinar que la joven, que cobraba una pensión por discapacidad, vivía con su bebé en una precaria casilla, en la que no contaba con los servicios básicos.
La chica, se indicó, había intentado suicidarse colgándose de un cable el sábado último, pero el hecho fue impedido por su pareja. La joven fue internada en un centro psiquiátrico y lo médicos determinaron que tenía adicción a las drogas.