En medio de pedidos de suspensión y denuncias cruzadas, el Correo Argentino develó esta tarde las ofertas económicas de las tres empresas que pasaron los filtros técnicos en la licitación por el servicio de escrutinio provisorio del resultado de las elecciones presidenciales de octubre. Y Smartmatic, según la información a la que accedió este medio, ofreció el precio más bajo: USD 17.093.888.
De esta manera, la empresa que ya se había alzado a fines del año pasado con el sistema de transmisión y procesamiento de actas de los comicios quedó mejor posicionada que sus competidoras INDRA y SCYTL, las otras dos firmas que pugnan por la licitación.
Smartmatic, con sede en Londres, se popularizó en la última década por su participación en los comicios de Venezuela, país que dejó en 2017 tras romper con el chavismo con denuncias de irregularidades.
INDRA, la multinacional con sede en España que monopoliza el negocio desde 1997, y que en las elecciones legislativas de 2017 volvió a ganar por un monto de USD 23 millones, presentó el precio más alto: USD 19.235.000. SCYTL, la compañía catalana liderada por un ex INDRA, ofertó USD 17.899.042.
El Correo había establecido en el pliego licitatorio que, tras el filtro técnico y de antecedentes, cuyo dictamen se oficializó hace algunas semanas, el ganador sería el que presentara el precio más bajo, siempre y cuando exista una diferencia del 10% con su competidora más próxima. En ese sentido, la puja final en una especie de «ballotage» quedaría entre Smartmatic y SCYTL.
Sería la primera vez después de 11 elecciones que la compañía española no se haría cargo del recuento provisorio de votos.
Sin embargo, y tal como anticipó este medio, INDRA analiza recurrir a la Justicia. Es que, según fuentes cercanas a la empresa, causó malestar el dictamen de evaluación de impugnaciones presentado por el correo este jueves en el que solo se aceptó una de las 20 observaciones entregadas por la multinacional española. Por esa observación, el ente postal estatal le bajó 8 puntos a SCYTL en el rubro de antecedentes.
«El correo está dando válidos procesos viciados», explicaron desde Indra, una firma liderada por Roberto Viaggio, un ex director de SOCMA, el holding de la familia Macri que manejó el correo hasta la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia en 2003.
Incluso la firma presentó esta mañana una queja formal ante el Correo Argentino para suspender la apertura de las ofertas económicas, que fue desechada. La cúpula de la filial en el país analizará el fin de semana los pasos a seguir. En el peronismo también siguen con atención el concurso.
Antes de lanzar la licitación, atravesada por un fuerte lobby empresario, el propio Mauricio Macri, obsesionado con el ajuste fiscal, había pedido abrir el concurso a otros oferentes y bajar el presupuesto.
Hubo en ese contexto una presión constante de las compañías con diversos funcionarios del Poder Ejecutivo y denuncias cruzadas por irregularidades en comicios en todo el planeta. Es que desde el Correo resaltaron que se trata de la licitación más importante del año: por algo los sobres con las ofertas estuvieron guardados este tiempo en una caja de seguridad fajada y custodiada por varias cámaras de seguridad.
El concurso sigue ahora con el análisis de los balances contables y la situación financiera de las empresas. Después de eso, Smartmatic y SCYTL deberán sentarse a pujar en una nueva compulsa de precios. El ganador se conocería finalmente en las próximas semanas.
