En la jornada de este miércoles las autoridades del Instituto de Investigación social, económica y política ciudadana, dieron a conocer el índice barrial de precios. En este sentido se informó que una familia santiagueño necesitó, en el mes de enero, de $22.000 pesos para solventar la canasta básica total.
Cabe mencionar que el índice barrial de precios, tiene por objetivo estimar el costo de vida en los distintos barrios de Santiago del Estero, mediante el cálculo del valor y la variación de la canasta básica de alimentos, compuesta por 57 productos de los rubros almacén, verdulería y carnicería.
De este modo, se estima la cantidad de dinero que una familia necesitó para cubrir sus gastos alimenticios y de bienes y servicios para no estar por debajo de la línea de pobreza.
Al respecto la licenciada Paola Griggio, directora del ISEPCI comentó que en el primer mes del año la canasta subió 0,34%. En el último mes del 2018 una familia de dos adultos y dos niños pequeños necesitaba $ 8779.97 para adquirir sus alimentos indispensables durante treinta días. Un mes después, la misma familia requiere de $ 8809.86 para solventar los mismos gastos. Mientras que la Canasta Básica Total (CBT) supera los $22000 para el mes de enero 2019.
Por otra parte argumentó que el aumento se produce en el marco del enorme crecimiento de los precios que azotó al bolsillo de las familias argentinas a lo largo de todo el año pasado, a medida que se fue acelerando la suba del dólar. En enero 2018 el valor de la divisa norteamericana estaba en $19,50, en julio había escalado a los $29 (+49%), y en diciembre ya estaba en $38 por unidad. En doce meses subió casi el 100%.
Este elemento, a lo que se suman los fuertes incrementos en tarifas y combustibles, impulsó hacia arriba el valor de los alimentos de la Canasta Básica, que entre enero de 2018 y el mismo mes de 2019 que acaba de finalizar, aumentaron un 46%.
La perspectiva para los próximos meses no es favorable ni para asalariados y jubilados, ni
para los sectores que reciben asignaciones sociales o salario social complementario, porque
los precios de los productos esenciales para vivir, las tarifas, y los combustibles no dejan de
aumentar, mientras que los incrementos anunciados para sus remuneraciones, al igual que
durante el año pasado, nuevamente estarán por debajo de la inflación calculada por el
propio gobierno.
Las bajas del consumo que se produjeron en los últimos meses son directa consecuencia de la pérdida de poder adquisitivo que se ha consolidado para la mayoría de la población.
