La jueza federal de Zapala Silvina Domínguez ordenó que la Gendarmería Nacional y otras fuerzas de seguridad se abstengan de ingresar a tierras ocupadas por la comunidad mapuche Raquithue. La resolución fue dictada al hacer lugar a una acción de hábeas corpus preventivo interpuesta por miembros de esa comunidad. La magistrada dispuso que ni la Gendarmería ni ninguna otra fuerza de seguridad o policial puede entrar a ese territorio sin autorización judicial o sin permiso de los mapuches.
El territorio vedado a las fuerzas de seguridad es el que se extiende desde el sector conocido como «El Saltillo», cercano a la seccional Las Coloradas hasta el arroyo Reculeufu, de este a oeste a ambos lados de ruta provincial n°61, a la vera del lago Huechulafquen, en el parque Nacional Lanín de la provincia de Neuquén.
Según la denuncia, en la madrugada del 8 de septiembre de este año, efectivos de Gendarmería ingresaron a la zona que ocupa la comunidad mapuche sin ningún tipo de permiso ni orden judicial. Indicaron que vestían uniforme oficial, se movilizaban en vehículos de la fuerza, se identificaron como gendarmes y dijeron que estaban buscando a Santiago Maldonado. Los denunciantes sostuvieron que dicho accionar tuvo que ver con una intención de «amedrentamiento» y «amenazas» dirigida hacia la Comunidad Raquithue y al pueblo mapuche, por lo que solicitaron que se garantice la libertad ambulatoria e integridad física de sus miembros, ya que «Gendarmería Nacional ingresó de manera ilegítima e inconsulta en territorio de la comunidad».
La jueza Domínguez consideró que el hecho denunciado estaba «cabalmente probado». Para llegar a esta conclusión tuvo en cuenta el relato de los denunciantes, las declaraciones de los guardafaunas y el propio informe elevado por la Gendarmería Nacional.
La magistrada dio por acreditado que el 8 de septiembre pasado, aproximadamente a las 04:00, efectivos del Escuadrón 33 San Martín de los Andes ingresó al territorio identificado como «Bahía 2», ubicado a unos 500 metros de la ruta provincial 61 con al menos un vehículo oficial. Ese lugar es parte de las tierras que ocupa la comunidad mapuche Raquithue. De acuerdo con lo descripto en la resolución de Domínguez, cuando salió un miembro de la comunidad de su vivienda los gendarmes le manifestaron que estaban buscando a Santiago Maldonado ya que les había avisado que podría estar en la zona, tras lo cual se retiraron.
La jueza federal Silvina Domínguez -ligada a Justicia Legítima– no sólo dio por probado el hecho, sino que coincidió con los denunciantes quienes señalaron que se trataba de un amedrentamiento y una amenaza hacia la comunidad y el pueblo mapuche.
