Pixee Fox tiene 25 años y un sueño que está cada día más cerca: convertirse en la versión humana de un dibujo animado, ya sea Tinkerbell (o Campanita), Aurora, la princesa de «La bella durmiente», Jessica Rabbit, la pulposa novia del conejo Roger, o Holli Would, la rubia de «Cool World».
La modelo se mudó a Carolina del Norte, en los Estados Unidos, para continuar su transformación física en la que ya lleva invertidos casi 120 mil dólares, informó el sitio Daily Mail. «Suecia es un país muy equitativo que no te impulsa a distinguirte», explicó la belleza escandinava.
Determinada a no pasar desapercibida ni un minuto más, Pixee se sometió a una serie de intervenciones, incluida una operación para que le extrajeran seis costillas con el objetivo de otorgarle una cintura de 35,56 centímetros.
Aunque tiene más de 79 mil seguidores en Instagram, Pixee ha recibido incontables críticas por su adicción a las cirugías plásticas y otras rarezaspropias de la fijación con los dibujos animados. «Para mí es un cumplido porque es lo que quiero ser», convino la joven.
Pixee también contó que no fuma ni bebe alcohol, que no consume drogas (salvo por los antibióticos en cada operación) y aseguró que se mantiene sana y «joven por dentro y fuera» gracias a una dieta orgánica y al gimnasio.
Fuente: MinutoUno