Una ola de ataques explosivos contra iglesias cristianas, los más graves desde el año 2000 (serie de atentados con bomba en aquella Nochebuena en varias ciudades terminasen con la vida de 18 personas e hiriesen a cerca de 100), mataron a 11 personas e hirieron a otras 40 en Surabaya, la segunda mayor ciudad de Indonesia, y las autoridades locales apuntan contra un grupo vinculado al Estado Islámico (EI).
Las explosiones se registraron durante las misas de hoy y con diferencia de pocos minutos en la iglesia católica de Santa María, alrededor de las 7:30 hora local (00:30 GMT), luego en una iglesia pentecostal y una tercera en un templo protestante.
Por su parte, el jefe de la policía nacional, Tito Karnavian, asegura que los autores de estos atentados suicidas son parte de una familia de seis personas, incluidas dos niñas pequeñas.
La familia -formada por la madre, el padre, dos hijos de 16 y 18 años y dos niñas de 9 y 12 años- estaba vinculada al movimiento Yamaah Ansharut Daulah, un grupo afín al EI, afirmó el jefe de la policía nacional, Tito Karnavian.
El líder de este grupo, Aman Abdurrahman, está siendo juzgado en Indonesia por una taque de 2016.
La primera de las explosiones ocurrió en la iglesia católica Santa María, donde murieron al menos cuatro personas incluido el autor del ataque.
Imágenes de una cámara de seguridad compartidas en las redes sociales muestran a un conductor en motocicleta que se adentra en la iglesia de Santa María e instantes después una nube de humo sale de la entrada del edificio.
A continuación hubo explosiones en la iglesia protestante de la calle Diponegoro, donde murieron dos personas, y después en la iglesia pentecostal de la calle Arjuno, donde hubo otras dos víctimas mortales.
Además, el equipo antiexplosivos de la Policía Nacional neutralizó una bomba en el exterior de la iglesia en Diponegoro.
Indonesia, el país con la mayor población musulmana del mundo, sufrió varios atentados por parte de milicianos islamistas desde 2000, cuando 18 personas murieron en ataques coordinados contraiglesias en Nochebuena.
La policía también fue un objetivo frecuente de ataques tras una gran operación contra los islamistas tras los atentados de 2002 en la isla de Bali, que mataron a 202 personas.
Fuente: Andes