P.: Usted como candidato presidencial, ¿qué tipo de campaña va a llevar adelante?
J.M.U.: Yo quiero plantear un modelo de campaña donde lo que busco es decirle la verdad a la gente. Plantear lo que creo que hay que hacer y cómo hay que hacerlo. Esa posibilidad real que tenemos, no es un determinismo histórico inevitable el hecho de que a la Argentina le tiene que ir cada vez peor. Yo creo que el país puede andar bien, nos va a costar muchísimo hacerlo, pero yo soy realmente optimista.
P.: ¿La inflación es el problema más urgente que tiene el Gobierno?
J.M.U.: Sí, pero creo que es mucho más profundo. La inflación es una consecuencia de un modelo de organización que lamentablemente es impotente para resolver los problemas estructurales de la Argentina. Creo que la inflación, la falta de trabajo, la pobreza, son consecuencia de la incapacidad que hemos tenido. No es una cuestión de una gestión o dos gestiones. Hoy tenemos uno de cada dos chicos pobres en la Argentina. Entonces mi planteo es que hay que cambiar el sistema de gobierno y la forma de laburar. Si seguimos igual, ¿por qué vamos a tener un resultado diferente?
P.: ¿Y cómo se baja la inflación?
J.M.U.: Esencialmente generando el modelo de una Argentina que apunta al desarrollo y a la producción. En Argentina donde la retracción de la actividad, la forma de luchar contra la inflación es enfriar la economía lo único que genera es lo que pasa hoy. Inflación y caída de la actividad al mismo tiempo. Entonces el problema es que hay que generar una base sólida y estructural para salir del círculo vicioso y entrar en una lógica donde se puedan atraer inversiones para potenciar la logística del modelo productivo. Hay que trabajar sobre la competitividad de las pymes y eso en alguna medida, si logramos confianza en el país, naturalmente la caída de la inflación, de la pobreza y la reactivación económica van a llegar. Pero hay que trabajar sobre las causas de la crisis y no sobre las consecuencias. Si no siempre vamos a volver a lo mismo.
P.: ¿Quién es su principal referente económico para armar un Ministerio de Economía?
J.M.U.: Yo creo que la Argentina tiene que armar un proyecto económico con niveles de consenso por encima de los personalismos. Yo estoy planteando la necesidad de ir a un gobierno de coalición con un sistema semiparlamentario. Estoy planteando que hay que sumar a todos al sistema político. Hay que armar un Consejo Económico y Social donde los distintos actores del sector empresario, sindical, sociedad civil sean parte de lo que significa el plan del desarrollo estratégico de la Argentina. Yo me quiero correr del tema del personalismo. Obviamente tenemos economistas de mucho prestigio como Lavagna. El otro día estuve reunido con una docena de economistas de menos de 40 años con enormes responsabilidades y una mirada muy moderna de Argentina. Pero esto no se resuelve con una persona, se resuelve con un cambio estructural en la forma de encarar el problema.
P.: ¿Cómo puede ser que los gobernadores del PJ no tengan un armado electoral homogéneo con un referente a nivel nacional?
J.M.U.: Porque el mundo cambió y la Argentina es parte de ese mundo donde un modelo de ese tipo ya no tiene anclaje en la demanda ciudadana de hoy. El peronismo, y la política en general, tiene que evolucionar para acompañar la evolución ciudadana. Si ofrecemos una forma de actuar a espejos de un mundo que ya no existe vamos a atrasar 40 o 50 años.
P.: ¿Cómo puede ser que los Gobernadores peronistas que convivieron ocho años con Cristina hoy no la quieran acompañar ante la posible reelección de Macri?
J.M.U.: Nosotros tenemos un modelo de país diferente. Vos lo decías, la mayoría de los gobernadores estamos dentro de Alternativa Federal porque queremos construir un país federal en serio. Y los dos modelos concentrados de poder, tanto el de Cristina como el de Macri, responden a una lógica que a mi juicio no contempla la construcción de una Argentina federal en serio.
P.: Muy bien no la deben haber pasado con Cristina porque al menos no quieren que vuelva…
J.M.U.: Más allá de las cuestiones de poder hay una cuestión ciudadana. Más de la mitad de los argentinos no quieren que siga Macri ni que vuelva Cristina. Los pueblos no vuelven para atrás, no hay muchos antecedentes. Sobre todo en esta época donde la curva de la evolución ciudadana es tan exponencial. Estamos en la fase donde la velocidad de los cambios no admite volver para atrás.
P.: ¿Cómo calificaría al gobierno de Macri?
J.M.U.: Creo que el Gobierno subestimó la envergadura de la crisis y sobrestimó el prestigio personal de Macri como herramienta para solucionar los problemas. Y los mercados, la generación de confianza, la llegada de las inversiones, no solo requieren prestigio personal del dirigente sino políticas públicas, seguridad jurídica. Cosas que no pasaron en la Argentina. Y lamentablemente por eso estamos como estamos.
P.: ¿Qué fue lo peor que hizo este Gobierno?
J.M.U.: Yo trato de no ponerme en el lugar de censor de nada, pero claramente el Presidente planteó que quería medir su gestión por el índice de pobreza y la inflación. Son los dos que peor están dando.
P.: ¿Por qué el kirchnerismo insiste tanto con sumar a Sergio Massa al armado de Cristina?
J.M.U.: Creo que todo espacio político busca ser los más amplio y sumar a la mayor cantidad de gente. Sería extraño que no lo busquen. Yo creo que la política atrasa cuando considera que los problemas se solucionan sumando dirigentes.
P.: ¿Qué opina del look de Lavagna? ¿Es un presidenciable de su espacio?
J.M.U.: Lavagna es un tipo que tiene un enorme prestigio más allá de si a algunos les gusta o no el look. Lo que me parece es que es un dirigente que además tiene un acabado conocimiento de lo que la economía y la sociedad argentina demandan. Me parece valiosísimo que pueda ser una de las opciones de este espacio.
Ámbito
