La presencia de personal de la Dirección de Calidad de Vida de la municipalidad en calle Alem generó, en la mañana del sábado, un conflicto con los vendedores de ropa usada ya que se les informó que ya no podrán seguir ocupando esos espacios, además se solicitó a aquellos que cuentan con un puesto en la feria que continúen trabajando en ese lugar.
En los últimos dos meses la presencia de vendedores de ropa usada a lo largo de calle Alem, entre Besares y 25 de Mayo, ha crecido y esta situación generó desorden, conflictos, denuncias y la falta de control por parte de las autoridades lo hacía más grave ya que las vías del ferrocarril también habían sido «tomadas» como espacio de ventas.
Atento a esta situación, desde el Centro de Comercio e Industria se había solicitado al área correspondiente que se tomen los recaudos necesarios para ubicar a esas personas en otros sitios teniendo en cuenta que se está trabajando arduamente en un cambio estructural del área comercial.
Es así que desde Calidad de Vida se dispuso iniciar operativos de control y procurar la reubicación de los puesteros que durante los días sábados triplican su número.
Los vendedores expusieron que este es su único medio de vida y que esdtán dipuetos a salir del lugar siempre y cuando los ubiquen en una zona donde puedan trabajar. También señalarom que la feria no es un sitio muy concurrido por la gente y las ventas son menores a las que consiguen estando en las calles.
Por su parte, las autoridades de Calidad de Vida adelantaron que desde el lunes se iniciarán operativpos de cotrol permanente en el sector.
