El Ministro del Interior, Tarek El Aissami, señaló que el Gobierno rechaza las imágenes difundidas a través de Internet, en las que aparecen niños portando fusiles automáticos y ametralladoras en una zona que se dice «liberada» y en apoyo a Chávez.
«En razón a la gravedad que reviste tan condenable hecho, hemos ordenado abrir una investigación para determinar las responsabilidades a que hubiere lugar», indicó el funcionario al canal oficial «Venezolana de Televisión».
El Aissami reaccionó ante la difusión de fotografías de niños mostrando las armas de guerra en una celebración del grupo radical «La Piedrita», en el oeste de Caracas.
El grupo dice apoyar al gobierno de Chávez.
El Aissami rechazó las fotografías y las calificó de «repudiable y moralmente inaceptable». Indicó que las imágenes violan los principios humanistas de la Constitución Bolivariana de Venezuela y que además atentan contra el desarrollo de los niños, niñas y adolescentes.
Afirmó que el gobierno está orientado hacia la construcción de un país de paz y no de violencia. «Toda la voluntad del gobierno y sobre todo del comandante Chávez está orientado hacia la construcción de una patria aferrada a la paz, la solidaridad y el amor. Nuestro compromiso es con la vida y la paz del pueblo, desarmando la violencia y sus antivalores», aseveró.
Mientras, la Fiscalía General informó que designó a dos fiscales del área metropolitana de Caracas para investigar la veracidad de las imágenes y determinar a los responsables.
La Fiscalía dijo repudiar la acción «toda vez que atenta contra la integridad» de los niños venezolanos.
Los menores fueron fotografiados con armas de guerra ante un mural del grupo radical en la que aparece la virgen María con el niño Jesús y un fusil, todo en el barrio obrero 23 de Enero, del oeste de la ciudad.
El Aissami señaló que el gobierno hace esfuerzos para desarmar a la población y ratificó el compromiso del gobierno con «la vida y la paz».
En la zona en la que fueron fotografiados los niños existen varios grupos radicales que dicen defender al gobierno de Chávez, amenazando con tomar las armas en caso de que el mandatario salga del poder.