“En su vida, un hombre puede cambiar de mujer, de partido político o de religión, pero no puede cambiar de equipo de fútbol”, decía Eduardo Galeano. Y tenía razón. Nacido en la ciudad de Nueva York, en 1968, Viggo Mortensen pasó gran parte de su infancia en la Argentina, dónde se hizo fanático del Club Atlético San Lorenzo de Almagro. Después, el destino quiso que volviera a su tierra de origen, que estudiara arte dramático y que terminara convirtiéndose en una verdadera estrella de Hollywood. Sin embargo, él nunca pudo olvidar su pasión por el azulgrana. Y lo demuestra cada vez que le surge una oportunidad.
De hecho, no es la primera vez que el actor hace ostentación de su camiseta de El Ciclón en eventos que nada tienen que ver con el fútbol y dónde, la mayoría de los asistentes, no tienen idea a qué hacen referencia sus colores. Tal como ocurrió este martes cuando Mortensen llegó a la 68° edición del Festival Internacional de San Sebastián, en España. luciendo una remera con el escudo del equipo de sus amores y una leyenda que decía: “Me verás volver”.
Aunque gran parte de la prensa apostada en el lugar no entendió el significado del mensaje de Viggo, del otro lado del Atlántico los hinchas de San Lorenzo enseguida se hicieron eco de esa frase perteneciente al tema La cuidad de la furia, de Gustavo Ceratti, que los socios del club utilizan para exigir que se apruebe la Ley de Rezonificación, con la que esperan poder regresar a Boedo.
Sin embargo, está claro que Viggo no asistió al festival sólo para hacer campaña en apoyo a San Lorenzo. Por un lado, el actor había sido convocado para recibir el premio Donostia en reconocimiento a su trayectoria, ya que en los últimos 35 años ha participado de más de medio centenar de películas. Y, por el otro, debía presentar Falling, el film que marca su debut como director cinematográfico.
La ópera prima de Mortensen clausuró el Festival de Sundance y forma parte de las películas seleccionadas por el Festival de Cannes. Está protagonizada por Lance Henriksen y por el propio Viggo, quien también fue el encargado de escribir el guión, junto a Terry Chen, Sverrir Gudnason, Hannah Gross y Laura Linney. ¿De qué se trata? De la historia de un hombre que vive con su marido y su hija adoptiva y que decide alojar por un tiempo en su casa a su padre, un granjero solitario, con quien colisiona sacando a la luz un verdadero drama familiar.
Después de haber trabajado con cineastas como David Cronenberg, Peter Weir, Jane Campion, Peter Jackson, Gus Van Sant, Brian de Palma, Agustín Díaz Yanes, Ana Piterbarg, Lisandro Alonso, David Oelhoffen, Peter Farrelly y Matt Ross, Viggo decidió lanzarse como director. Sin embargo, está claro que o piensa abandoar su faceta actoral.
Mortensen no sólo formó parte del elenco de la trilogía fantástica El señor de los anillos, en la que interpretó al inmortal Aragorn que marcó un ates y un después en su carrera, sino que también ha estado nominado en la categoría Mejor Actor para los Premios Oscar en tres ocasiones por Promesas del Este (2007), Captain Fantastic (2016) y Green Book (2018).
Claro que, además de la interpretación, la escritura, la producción y la dirección de películas, Viggo disfruta de otras pasiones como la pintura, la música, la fotografía y la literatura. Y la principal: el fútbol. En especial, cuando juega el Ciclón.
