El permanente conflicto entre miembros del crimen organizado y transportistas de Acapulco, Guerrero, quedó en evidencia una vez más, luego de que incendiaran un camión del servicio público de transporte.
Los hechos ocurrieron al rededor de las 12:45 horas del lunes, cuando un grupo armado roció con gasolina la unidad que se encontraba estacionada esperando turno de salida.
El camión estaba en la calle Vasco Núñez de Balboa casi esquina con Diego Hurtado de Mendoza del fraccionamiento Hornos, a una cuadra de la zona turística del puerto.
Según los reportes, al chófer de la unidad identificado como Mario «N», hombres armados lo golpearon, lo obligaron a bajar del camión y posteriormente incendiaron la unidad. Los delincuentes llevaban dos contenedores de combustible. Afortunadamente, no había usuarios a bordo.
Al lugar de los hechos arribaron elementos del cuerpo de bomberos quienes intentaron infructuosamente sofocar el incendio, ya que lamentablemente la pesada unidad fue declarada como perdida total al ser consumida por las llamas.
Hace una semana, diversos concesionarios del servicio público de transporte urbano en Acapulco, denunciaron que integrantes del crimen organizado les exigieron un pago semanal como extorsión para dejarlos trabajar sin problemas, pero ante la negativa de algunos para cumplir dicha exigencia, los amenazaron con quemarles sus unidades y levantar a los chóferes hasta que cumplieran.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran el camión de transporte público incendiarse y con una fotografía en la parte trasera de la alcaldesa, Adela Román, con motivo de su Primer Informe de Gobierno.
Con todo y candado, empresarios de las estaciones de servicio en Acapulco, Guerrero, cerraron las bombas de gasolina por amenazas, exigencia de cuota y extorsión.
El empresario de gasolineras en el puerto, Carlos Reyes Paris, dijo que la inseguridad y otras circunstancias como amenazas y extorsiones «han cerrado los turnos nocturnos de 17 centros de servicio sólo en el puerto de Acapulco».
Sobre las amenazas a concesionarios, Reyes Paris, dijo que no existe una zona en particular ya que las extorsiones se presentan en todo Acapulco.
Negó categóricamente que en el puerto no hay huachicoleo (robo de combustible), aseguró que no hay ductos y que el abastecimiento se realiza por ductos que están custodiados y vigilados por efectivos de la Marina y la Sedena.
En 2011, al menos 32 propietarios de gasolineras en Guerrero cerraron sus instalaciones en protesta por la inseguridad. Según su testimonio, en los últimos días de agosto, murieron varios clientes debido al fuego cruzado, ademá de sufrir numerosos asaltos durante la noche y el día.
En un conteo publicado por la organización Seguridad, Justicia y paz, la ciudad de Acapulco apareció en segundo lugar entre las metrópolis más violentas del mundo 2018, con 948 homicidios. Tijuana, Baja California, se posicionó como la primera, con 2,640 asesinatos.
El fin de semana, la noticia sobre el asesinato del fotógrafo, Erick Castillo, en dicho puerto mexicano, conmocionó a México.
El colaborador de Discovery Channel fue asesinado afuera de una tienda de conveniencia en Barra Vieja. La Fiscalía General del Estado de Guerrero fijó como principal móvil del asesinato, un intento de robo de su camioneta.
No obstante, la Asociación de Periodistas Desplazados y Agredidos exhortó a las autoridades a indagar su se trató de un ataque director en contra de Castillo.
