Llegó el gran día para Wanda Nara en la televisión italiana. A las 20.30 hora de Roma, las 16.30 en nuestro país, la empresaria empezará a definir su suerte en Ballando con le stelle, el certamen similar al Bailando por un sueño que la tiene como una de las cuatro finalistas. Para arribar a esta instancia, contó con el invalorable aporte de su partenaire Pasquale La Rocca, cuatro veces campeón del concurso en diferentes partes del mundo. Pero también puso sobre la pista su disciplina, resiliencia y su obstinación, se fue superando gala a gala y logró convencer a todos.
“Acaba de salir nuestra tarjeta de voto en todos los perfiles sociales de Ballando con le stelle. Para apoyarme en esta aventura, sólo tienes que poner un “like” en cada una de nuestras tarjetas sociales. ¡Votá por nosotros, necesito que lo consigamos! Los amo”, escribió Wanda, que en sus historias agregó un instructivo para facilitarle la tarea a los internautas.
Poco podrán hacer sus seguidores a la hora de la verdad, cuando la empresaria y el bailarín salten a la pista a hacer lo suyo. Así, coronarán dos meses intensos, en los que se superó gala a gala y derribó prejuicios y cuestionamientos. Vale recordar que el paso de Nara por los certámenes locales no había sido el mejor y ella misma se cuestionó sus escasas dotes de bailarina. Pero en otra muestra de resiliencia, ratificando por si hacía falta que para ella no hay imposibles, hoy la tiene en la antesala de la victoria.
Promediando la semana, la conductora había entregado un resumen de su andar en la competencia :“Ha sido un viaje maravilloso, apasionante desde el principio. Me estoy preparando con todo mi corazón para la final del sábado para no decepcionarlos”, escribió en italiano en su cuenta de Instagram junto a un video como prueba. Como siempre, la rubia se las ingenia para que se hable de ella. Sus logros, sus pesares, sus alegrías, sus escándalos, su familia. Por un motivo o por otro, Wanda siempre es tema de conversación.
En el camino a la final, Wanda tropezó y se levantó, como tantas veces en su vida. Mostró sus heridas de guerra con orgullo y en familia, fiel a sus principios. Y siguió adelante. Escuchó cada consejo y no se conformó con pasar etapas. Desde el momento mismo en el que alcanzó el desafío, supo que iba a estar esta tarde argentina, esta noche italiana, en la gran final. Y ahora, solo depende de ella.
Fuente Teleshow