El delantero argentino Mauro Icardi dejó ayer de ser el capitán de Inter de Milán y el entrenador del equipo, Luciano Spalletti, lo acusó de negarse a jugar el partido de esta tarde ante Rapid Viena, de Austria, como visitante, por la ida de los 16avos de final de la Europa League. A primera hora, el club de Milán, a través de un escueto comunicado, informó que quien llevaría el brazalete iba a ser el arquero esloveno Samir Handanovic y luego difundió la lista de convocados para viajar a Viena con la sorprendente ausencia del atacante.
Los medios italianos lo tienen como principal noticia del dia. Es un hombre muy importante para el club de Milán y son muchas las conjeturas ante tamaño desencuentro. Según algunas publicaciones, la decisión de quitarle la capitanía a Icardi luego de tres años se debe a las declaraciones de la esposa y representante del jugador, Wanda Nara, nunca negadas públicamente por el futbolista. «Inter debería cuidarlo más», había soltado Nara, una de las tantas frases explosivas.
La vedette y representante es panelista del programa deportivo Tiki Taka en la televisión italiana y el domingo último afirmó en referencia a la renovación: «La prioridad es el Inter, pero nunca llamé al club para pedir la renovación. No tenemos prisa». Icardi tiene contrato con el Inter hasta 2021 pero su continuidad no está asegurada, ya que el jugador y su mujer no se pronunciaron ante el intento de los directivos de prolongar el vínculo contractual.
Nara, además, disparó directamente sobre Luciano Spalleti tras la victoria del sábado ante el Parma (1-0), con gol de Lautaro Martínez. «¿Por qué Icardi no marca? Siempre lo ha hecho. Lautaro anotó por un gran movimiento de Mauro, que estuvo poco acompañado. A lo mejor Spalleti debió meter antes a Lautaro. Se aprovecha de que Mauro y Lautaro son amigos y entre ellos no hay rivalidad», cuenta Marca.es. Además, algunas frases cuestionando el funcionamiento táctico del equipo no cayeron bien en el plantel.
«El club comunica que el nuevo capitán del equipo es Samir Handanovic», fue el breve mensaje del club de Milan ayer en su cuenta oficial de Twitter. «Icardi estaba convocado, fue él el que no quiso venir», manifestó Spaletti. Y agregó: «Quitarle el brazalete de capitán a Icardi fue una decisión difícil y dolorosa, teniendo en cuenta su valor. Tomamos esta decisión con todos los integrantes del club. Ha sido única y exclusivamente por el bien del club». Icardi suena como posible refuerzo de la Juventus y el Real Madrid, pero hasta el momento ningún club realizó una oferta por la ficha del delantero rosarino.