“Voy a trabajar mucho, eso es lo primero que me dijeron que hay que hacer. Mi actividad siempre fue ejecutiva. La tarea inicial es definir el curso y las claves de la transición. Ayer [por este domingo] hablé con el actual presidente [Luis Lacalle Pou] para armar, desde hoy mismo, la ruta de transición, que es larga”, contó Orsi, que se define como un representante de la izquierda moderada.
Orsi: «Desde hoy ya tengo la cabeza puesta en todo lo que hay que hacer»
Yamandú Orsi aseguró que ya está planeando en la transición que se viene con el gobierno de Luis Lacalle Pou (intenciones que también expresó el presidente el día de ayer) y que ya se encuentra armando los equipos que lo acompañarán en la gestión que se viene en estos siguientes cinco años.
«Desde hoy ya tengo la cabeza puesta en todo lo que hay que hacer. Empezar a trabajar en la transición y empezar a armar equipos y, por supuesto, estar muy atentos a la necesidad de la gente», aseguró el flamante presidente en diálogo con Radio 10 en el programa de Gustavo Sylvestre.
En tanto, fue consultado sobre la posible posición del Uruguay en la región, específicamente en el Mercosur y en relación a ser posiblemente una pieza clave entre el relacionamiento de Brasil y Argentina – que ya han tenido cruces y rispideces entre sus mandatarios – teniendo en cuenta la historia del Uruguay frente a conflictos de este tipo y su conocido posicionamiento.
«Uruguay tiene una especie de vocación histórica que es de articulador. Esa vocación hay que tomarla y, en vez de verla como algo negativo, es tu oportunidad», comentó Orsi, quien tiene una muy buena relación con el presidente brasileño Lula Da Silva a partir de su gran amistad con su padre político José Mujica.
Por otro lado, el gobierno argentino se mostró abierto a llevar a cabo una agenda bilateral con el Uruguay. A pesar de no compartir ideologías políticas, tanto Javier Milei como Orsi han mostrado intenciones tener buenas migas. «Nunca estuve con Milei pero sí con gente cercana, con quienes tengo un vínculo fluido», aseguró Orsi, aunque sin dar nombres pero admitiendo que son funcionarios de segunda y tercera línea del gobierno de derecha argentino.
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