Lionel Messi sumó acaso el gol que le faltaba para ser definitivamente el gran favorito a ganar en enero próximo el Balón de Oro (sería el cuarto en su cuenta personal), nada menos que en la final del Mundial de Clubes 2015 ante River, el cuarto en tres ediciones disputadas que lo colocan como segundo máximo goleador en la historia del certamen que disputan los campeones continentales.
La Pulga anotó su primer tanto en 2009 cuando definió de pecho la final del Mundial ante Estudiantes de La Plata. Luego, en 2011, hizo dos de los cuatro del Barcelona al Santos donde entonces jugaba Neymar y en la de hoy abrió la cuenta con un tanto que debió ser anulado porque controló la pelota con su brazo izquierdo, falta que sin embargo fue ignorada por el árbitro iraní Alireza Faghani.
Con sus cuatro goles, Messi quedó en el segundo puesto de los máximos anotadores del certamen de la FIFA junto al brasileño Denilson Martins (Pohang Steelers) y al egipcio Mohamed Aboutrika (Al-Ahly). Quien se mantiene en lo más alto de la tabla de artilleros es Cesar ChelitoDelgado, el argentino del Monterrey de México, con cinco goles en seis partidos.
Barcelona, por su parte, llegó a los tres títulos en el Mundial de Clubes (2009, 2011 y 2015) y así se colocó como el máximo ganador del torneo por encima de Corinthians, que lo sigue con dos.
