Una turista madrileña se bañaba en las playas de Canarias cuando súbitamente un tiburón sedoso la atacó en su antebrazo a tan sólo 20 metros de la orilla según consignaron diferentes medios locales. La mujer, identificada como Cristina Ojeda, intentó restarle importancia al asunto luego de mostrar por su cuenta de Twitter las heridas que le había provocado el ejemplar.
El hecho ocurrió el pasado 25 de diciembre cuando se bañaba en la playa de Arinaga, en Gran Canaria, y rápidamente provocó el temor de los demás turistas que allí se encontraban. Ojeda publicó las imágenes de la mordedura en su cuenta de Twitter y no esperaba que provocara tantas reacciones y tanto pánico entre los demás pobladores y visitantes.
«Hoy he tenido un encuentro cara a cara con un tiburón. Cosas que pasan cuando nadasen Canarias en diciembre», había publicado en esa red social. Sin embargo, al ser consciente de la repercución que su post había tenido, debió llamar a la calma. «Esto empieza a desmadrarse», manifestó la mujer y añadió: «Por favor, sin alarmismos. Me metería de nuevo a nadar mañana si no fuera por el vendaje». La víctima debió ser asistida por personal médico quien suturó las heridas.
Ojeda intentó tomarse con humor su experiencia. «Socorrer gente el 11M, premios de investigación, operar fracturas de heridos graves… y lo que me hace famosa es que me mordió un tiburón», concluyó la médica madrileña.