La Casa Blanca tomó nota del pedido del gobierno argentino y aseguró que acelerará la publicación de los documentos secretos sobre la última dictadura militar. Así lo indicó el director del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, Mark Feierstein. Si bien hay una voluntad política por no hacer engorroso este proceso, se espera que la desclasificación lleve tiempo, pues será la primera vez que se darán a conocer escritos que tienen bajo su poder las agencias federales de inteligencia, el FBI y el Pentágono.
Aunque el gesto político en materia de Derechos Humanos es uno de los puntos claves de la agenda bilateral con Barack Obama, quien llegará al país este martes, Feierstein advirtió que «lo más importante es que éste es un viaje sobre el futuro, no es un viaje sobre el pasado».
«El Presidente ha dicho a menudo que no quiere ser cautivo del pasado. No tiene miedo a confrontar el pasado y reconocer lo que puede o no puede haber ocurrido, pero, como señaló en otros contextos, muchas de las cosas que la gente debate en este hemisferio o en otras partes son en torno a eventos que ocurrieron antes de que él naciera. Y lo importante para subrayar es que es una oportunidad para revivir la relación, no sólo entre los dos gobiernos, sino entre los dos pueblos», explicó el alto funcionario en declaraciones ante medios argentinos en Washington.
Fue prácticamente una década de distancia diplomática entre ambos países, coincidente con los mandatos de Néstor y Cristina Kirchner. Aquellas gestiones mantuvieron una política exterior más volcada hacia los países de la región y otras naciones emergentes, y tejieron acuerdos y alianzas estratégicas con quienes le disputan el liderazgo a los Estados Unidos, como China y Rusia.
«ES UNA OPORTUNIDAD PARA REVIVIR LA RELACIÓN, NO SOLO ENTRE DOS GOBIERNOS SINO ENTRE LOS DOS PUEBLOS»
Tras el cambio de gobierno y la llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada, Feierstein asegura que existe una oportunidad «extraordinaria» para convertir a la Argentina en un «excelente» socio regional y global. Se trata de un refuerzo a la mirada que tiene Obama de mayor «involucramiento y asociación respetuosa» con América latina, y que incluye el deshielo de las relaciones con Cuba.
«Reconocemos el interés del nuevo gobierno en realzar el rol global del país. Además queremos ayudar a facilitarlo. La Argentina puede ser un excelente socio de Estados Unidos en asuntos bilaterales, regionales y globales», sostuvo.
El funcionario estadounidense explicó también que quieren cooperar con la recuperación económica del país y el combate al narcotráfico, dos de los tres objetivos centrales del gobierno macrista.
Los archivos secretos
Sobre los documentos, Feierstein recordó que el gobierno norteamericano ya desclasificó 4000 archivos sobre la dictadura militar. Lo novedoso es que en la tarea participarán ahora otras agencias gubernamentales, además del departamento de Estado, como el FBI y el Pentágono.
«Nosotros anticipamos que será un proceso que involucrará la revisión de miles y miles de documentos y por eso llevará cierto tiempo, no sabemos cuánto. Queremos agilizar el proceso lo máximo posible y trabajar junto a las agencias», precisó.
Acerca de la visita y lo coincidente con el 40 aniversario del Golpe de Estado, una cuestión que generó irritación en los organismos de Derechos Humanos y la izquierda, Feierstein planteó que su intención fue «manejarlo de una manera apropiada» por la sensibilidad del tema.
«Hemos consultado con el Gobierno argentino y grupos de derechos humanos sobre cuál era la mejor forma de manejar esta visita. En el curso de estas discusiones tuvimos la oportunidad de hablar del tema con los organismos de derechos humanos. Nosotros reconocemos el enorme rol que han tenido las Abuelas de Plaza de Mayo durante la guerra sucia y el presidente Obama sabe el papel vital que han tenido y que continúan desempeñando», concluyó el hombre de la Casa Blanca.
