Pese a las reuniones iniciadas hace 3 meses, el conflicto de intereses económicos se mantiene en su punto más álgido entre jugadores, representantes y dueños de franquicias en la NBA que ya suspendió su pretemporada, sus partidos de preparación y, de manera inminente, lo haría con la primera parte de la temporada regular.
Por eso, los cinco argentinos contratados en los Estados Unidos podrían sumarse a los 68 jugadores que ya se fueron del circuito NBA.
Hasta el momento, ninguno tiene su futuro definido sino que evalúan las diferentes ofertas que se han presentado, para no perder ritmo de actividad profesional habida cuenta de que están en las últimas etapas de sus carreras y por delante están nada menos que los Juegos Olímpicos de 2012.
Emanuel Ginóbili figuraba como opción para el club Virtus Bologna, que antes, sin embargo, espera el ‘sí’ de Kobe Bryant, la gran estrella norteamericana.
En Europa, los clubes ya tienen armadas sus estructuras para la próxima temporada y tampoco será fácil que incorporen más de uno o dos jugadores NBA los que, además, poseen contratos y seguros por demás elevados para cualquier franquicia.
Por el momento, el escolta de San Antonio Spurs comenzó a entrenarse con el Weber Bahía Estudiantes, aunque sobre esta situación «Manu» expresó: «Vine a dar una mano o a aportar algún consejo, pero no quiero que la gente se ilusione. La posibilidad de jugar la Liga Nacional es muy remota».
Luis Scola y Andrés Nocioni, en tanto, esperan por las negociaciones que lleva adelante Claudio Villanueva, representante de ambos, quien le adjudicó al Caja Laboral Boskonia la oferta más formal por ambos aunque, por ahora, nada está definido.
Uno de los que más ofertas recibió fue Fabricio Oberto: 14 de los 16 clubes de la Liga Nacional lo tentaron, pero no aceptó ninguna. Ante este escenario, su representante, Carlos Prunes, determinó: «No creo que juegue en el país».
Por último, Carlos Delfino, jugador de Milwaukee Bucks, es por ahora el de futuro más incierto, no porque no cuente con opciones, sino porque privilegia el disfrute de su tiempo mientras no haya definiciones concretas en el lockout que mantiene en vilo a gran parte de lso Estados Unidos.